Los inconformes aseguran que la llegada de personajes controversiales al partido guinda, atenta contra los principios de Morena
19 de octubre/ Cancún, Q. Roo.- Integrantes de las bases del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Quintana Roo, reprocharon la incorporación de Paul Carrillo de Cáceres al gabinete del gobierno estatal, pues como alcalde de Cancún -por órdenes del entonces gobernador, Roberto Borge- dio la instrucción a policías para la violenta represión del magisterio en el Palacio municipal, el 14 de octubre del 2013.
“Ahora resulta que los priistas represores están en la 4T, porque a Paul Carrillo lo acaban de nombrar secretario de Desarrollo Económico estatal.
“Entonces esta es una protesta porque esto va contra los principios de Morena, esto no es Morena”, dijo Maricruz Carrillo Orozco, uno de los cuadros fundadores del morenismo local y de los más críticos al interior del partido.
Carrillo Orozco, junto con otros militantes, se presentó ayer en el Parque Los Gemelos, en esta ciudad, durante la primera Asamblea Informativa encabezada por la dirigente nacional, Luisa María Alcalde, a quien intentaron abordar para exponerle las profundas contradicciones en que ha incurrido el movimiento en Quintana Roo.
“Ustedes recordarán que el 14 de octubre del 2013 fuimos reprimidos en la plaza del ayuntamiento, por órdenes de Roberto Borge Angulo, que está preso, y por Paul Carrillo”, dijo la morenista y ex secretaria de Desarrollo Social del gobierno municipal de Cancún.
La protesta fue impulsada –dijo– desde las bases fundadoras de Morena y de integrantes del magisterio local, quienes padecieron aquella represión del 14 de octubre, “que no se olvida”.
“Estaban granaderos, donde fue una persecución, donde golpearon a maestros, maestras, padres de familia y estudiantes, podrá quedar en el olvido para las autoridades, pero no para el magisterio; 14 de octubre no se olvida y Paul Carrillo es un represor y todavía tiene mucho que deberle al magisterio.
“Acabamos de conmemorar el dos de octubre, en donde precisamente la presidenta (Claudia Sheinbaum) habló de que tenemos que recordar las luchas sociales. Y es una incongruencia premiar a un represor para que ocupe hoy por hoy un cargo estatal (…) es indignante ver que Paul Carrillo esté hoy premiado y que esté en el gobierno estatal, cuando ha sido uno de los represores. Va en contra de la 4T”, sostuvo.
Afirmó que el nombramiento de él y la incorporación de personajes controvertidos y cuestionados por la ciudadanía que militaron en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y ahora están en Morena y en cargos públicos del estado, los municipios y el Congreso, va en contra de los postulados del partido.
Lo anterior –expuso– se extiende a los privilegios que se han dado a los militantes del Partido Verde (PVEM), por encima de las y los fundadores de Morena.
Maricruz Carrillo agregó que otra contradicción del morenismo local es que se haya organizado, previo a la Asamblea pública, una reunión “petit comité” con Alcalde Luján y Andrés López Beltrán –hijo del ex presidente, Andrés Manuel López Obrador– y secretario de Organización de Morena, y la dirigencia estatal, para luego realizar un evento masivo con las bases.
“Queremos que la dirigencia nacional se entere de lo que está pasando aquí en Quintana Roo y hoy las bases morenistas, de verdad fundadores, el pueblo, estamos indignados por lo que está ocurriendo”, concluyó.
La modesta protesta intentó ser acallada, al mandar a la batucada para tocar justo a unos metros de donde se encontraban las y los manifestantes, medida que se ha replicado en otros eventos públicos de autoridades municipales y estatales para ahogar las voces y consignas.
Durante su discurso, Alcalde Luján advirtió precisamente a que, ante la ausencia de una verdadera oposición, Morena debía mantenerse unido, pues la oposición podría surgir desde el interior del partido.
Paul Carrillo de Cáceres presidió el ayuntamiento de Benito Juárez en el periodo 2013-2016, recobrando el municipio para el PRI, luego de dos administraciones de oposición, encabezados por Julián Ricalde Magaña (2011-2013) y Gregorio Sánchez (2008–2010).
Entre los diversos episodios que marcaron en negativo su trienio figuran el haber revocado el Programa de Desarrollo Urbano 2013 (PDU), modificándolo para presuntamente beneficiar intereses inmobiliarios y proyectos que sobre densificaron la zona hotelera; la represión del magisterio en el Palacio municipal; y el envío de fuerza pública para contener a la ciudadanía que intentaba detener la devastación dentro del Malecón Tajamar, en enero del 2016.