Las heridas del sacerdote por su accidente automovilístico en la carretera Monclova-Saltillo terminaron con su vida.
Como un padre sencillo y humilde lleno de espiritualidad es como sacerdote Rodrigo Hernández Cerda, párroco de San Carlos Borromeo en Candela será recordado, relató Christian Figueroa Martínez párroco de San Antonio de Padua luego de que las heridas del sacerdote por su accidente automovilístico en la carretera Monclova-Saltillo terminaran con su vida.
Luego de que se diera a conocer la muerte de Rodrigo, la comunidad de sacerdotes se encuentran de luto, agradeciendo por el tiempo que Rodrigo sirvió al ministerio y orando para que llegue a la luz perpetua.
Convivencia. “Lo vamos a recordar por su optimismo, sencillez, su buen corazón, entrega a la gente y sin duda alguna porque siempre estaba como un pastor cuidando a sus ovejas”, compartió Christian quien agregó como Rodrigo era una persona sencilla e integra que siempre tenía detalles de estar al pendiente con la comunidad y era algo por lo que se daba mucho a querer.
“Dios lo ha llamado a su presencia, sé que tienen un lugar infinito en el cielo, los invito a que oren mucho por él, hay que pedirle al señor que le dé un eterno descanso”, puntualizó.