Se presentaron en un conocido sector de la ciudad, como lo es Minas del Seco, donde además una mujer fue detenida por haber interferido en acciones.
Un disturbio doméstico registrado en un domicilio de la calle Rodríguez, en el sector Minas del Seco al norte de Eagle Pass, resultó en la detención de dos personas, una de ellas por interferir con las autoridades durante su labor. Los detenidos fueron identificados como Mauricio Ramos, de 31 años, y su madre, Esther Estrada Ramos, de 66 años.
El incidente se desencadenó cuando el Departamento del Sheriff recibió una llamada de emergencia, alertando sobre una situación de violencia en la vivienda.
Situación. Al llegar al lugar, los agentes se encontraron con la puerta principal abierta y gritos provenientes del interior de la casa, lo que indicaba una situación de crisis. Según el Jefe de Detectives, Roberto de León, los policías intentaron entrar al domicilio para intervenir, pero fueron obstaculizados por Esther Estrada Ramos, quien les impedía el paso, por lo cual fue detenida por interferir con las labores de los oficiales.
En el interior de la vivienda, la policía encontró a una pareja que se había agredido físicamente. La víctima, cuya identidad no ha sido revelada, presentaba visibles golpes en el rostro. Paramédicos llegaron rápidamente al lugar y, tras evaluar el estado de la persona, la trasladaron a un hospital para recibir atención médica. Por su parte, Mauricio Ramos, quien también presentaba lesiones en el rostro, fue arrestado bajo múltiples cargos, que incluyen agresión, violencia familiar, resistencia al arresto y violación de una orden de protección que le prohibía acercarse a la víctima. Mauricio Ramos enfrenta cargos serios por agresión y violencia familiar, además de violar la orden de protección en su contra, lo que agrava su situación legal. La orden había sido impuesta previamente como medida de protección hacia la víctima, y su incumplimiento se considera un delito grave.
Problema. Además, Ramos fue acusado de resistirse al arresto, lo que complicó aún más el proceso de su detención.
En cuanto a Esther Estrada Ramos, fue detenida por interferir con el trabajo de los agentes. A pesar de sus 66 años, las autoridades señalaron que su resistencia activa obstaculizó la intervención policial en una situación que requería una acción inmediata para salvaguardar la integridad de la víctima. Este tipo de obstrucción es considerado un delito, por lo que también deberá enfrentar cargos.
El Jefe de Detectives, Roberto de León, expresó su preocupación por la naturaleza del incidente y destacó la gravedad de los delitos cometidos. Señaló que la violencia doméstica es un problema serio que pone en riesgo la vida.