Este martes se ha publicado el primer Barómetro Bollo Natural Fruit sobre los Hábitos de Compra y Consumo de Frutas en España, el cual ofrece un panorama detallado sobre las costumbres de los españoles en cuanto a la adquisición y consumo de frutas frescas. El estudio revela cómo los consumidores están adaptando su comportamiento ante las nuevas tendencias y condiciones económicas. Aunque la inflación ha afectado la compra y consumo de frutas, estas siguen teniendo un papel crucial en la dieta de los españoles.
El barómetro destaca que casi la mitad de los españoles (48%) afirma consumir más fruta que hace cinco años, mientras que un 22% cree que ahora consume menos.
En cuanto a la frecuencia de consumo, el 70% de los encuestados señala que consume fruta diariamente, un 20% lo hace más de tres veces por semana, y un 10% lo hace menos de tres veces por semana. Además, un 40% de los consumidores prefiere continuar comprando las mismas marcas, a pesar de las promociones.
Las frutas más populares en España son naranjas, plátanos, manzanas y mandarinas, representando más del 50% del consumo total de frutas frescas. Durante el verano, el melón y la sandía ganan protagonismo, alcanzando el 20% del mercado en esa temporada.
El estudio también muestra que, si bien la mayoría de los consumidores prefieren comprar frutas enteras y a granel, los jóvenes tienden a optar por frutas ya cortadas y envasadas, principalmente por conveniencia, como opción rápida y saludable.
En el caso de los niños, las frutas más consumidas son mandarinas, plátanos y manzanas, debido a su facilidad de consumo. No obstante, el consumo de frutas entre menores de 18 años ha disminuido ligeramente en comparación con generaciones mayores.
Las personas mayores de 45 años son quienes más consumen frutas, motivadas principalmente por razones de salud y por el "placer sensorial" que obtienen del sabor y la frescura. Las naranjas son especialmente populares entre los mayores de 65 años debido a sus beneficios para la salud.
En general, los consumidores asocian una buena fruta con su sabor (45%), frescura (18%) y madurez (14%). En cambio, una mala fruta se considera aquella que está demasiado madura o caducada (33%), es insípida (33%) o tiene mal aspecto (18%).