Un estudio reciente ha descubierto que el cerebro cuenta con un sistema para eliminar desechos que ayuda a eliminar las proteínas dañinas asociadas con el desarrollo de la demencia y la enfermedad de Alzheimer.
Investigadores informaron en la edición del 7 de octubre de la revista *Proceedings of the National Academy of Sciences* que exploraciones avanzadas por imágenes han revelado una red de estructuras llenas de líquido a lo largo de las arterias y venas del cerebro. Estas estructuras permiten el flujo del líquido cefalorraquídeo, lo que podría facilitar la eliminación de proteínas de desecho como el amiloide y la tau.
Estas proteínas tóxicas tienden a acumularse en el cerebro de pacientes con Alzheimer, formando placas y ovillos que son característicos de la enfermedad. Aunque investigaciones previas habían identificado canales similares en cerebros de ratones, esta es la primera vez que se confirma su existencia en humanos, según los investigadores.
"Nadie lo había demostrado hasta ahora", señaló el Dr. Juan Piantino, investigador principal y profesor asociado de neurología pediátrica en la Facultad de Medicina de la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón (OHSU). "Esto demuestra que el líquido cefalorraquídeo no entra al cerebro de manera aleatoria, como si se sumergiera una esponja en un cubo de agua; se mueve a través de estos canales".
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores inyectaron a cinco pacientes que se sometieron a una cirugía cerebral en OHSU un marcador que se trasladaría junto con el líquido cefalorraquídeo al cerebro. Posteriormente, el equipo utilizó resonancias magnéticas para seguir la propagación del marcador.
Las imágenes revelaron que el líquido se desplazaba a lo largo de canales bien definidos en el cerebro, que los investigadores denominaron "espacios perivasculares". "Se puede observar cómo estos espacios perivasculares oscuros en el cerebro se iluminan", indicó la Dra. Erin Yamamoto, investigadora colíder y residente de cirugía neurológica en la OHSU.
Los investigadores creen que estas vías son fundamentales para eliminar los desechos producidos por el cerebro, de manera similar a cómo el sistema linfático elimina desechos generados por el sistema inmunológico en todo el organismo. "Se pensaba que estos espacios perivasculares eran significativos, pero nunca se había demostrado", agregó Piantino. "Ahora lo hemos logrado".
En el futuro, los investigadores podrían centrarse en estrategias para mejorar este sistema de eliminación de desechos en el cerebro. Por ejemplo, se ha sugerido que un sueño reparador puede ayudar a optimizar la eliminación de proteínas de desecho.