El evento se llevó a cabo en la parroquia San Francisco de Asís y conmovió a todos los presentes.
C on mucho amor y respeto por los animales, gatos, perros, tortugas, aves y otras especies recibieron la bendición en nombre de Dios en la parroquia San Francisco de Asís, cuyo santo patrón se conmemora cada 4 de octubre, misma fecha en la que también se celebra el Día Mundial de los Animales.
Fue el sacerdote José Pérez Larios el encargado de rociar agua bendita a las mascotas que llenaron la explanada del templo parroquial. El acto tiene como fin reconocer a San Francisco de Asís, santo que procuró a todas las especies vivas, proclamó el respeto y mostró que toda criatura merece ser cuidada.
Mensaje. “Hacemos esta bendición el 4 de octubre por la importancia que tuvo para San Francisco descubrir que todas las criaturas son parte de la creación de Dios.
Cuando somos sensibles con los animales, que son tan indefensos y nos necesitan, porque Dios nos ha creado en ese sentido por encima de ellos en cuanto a la razón, pero nos ha puesto como custodios de todos ellos, entonces demostramos esta cercanía y protección.
Nos hacemos más sensibles a las necesidades de los humanos; por eso, no es que humanicemos a los animales, pero sí nos sensibilizamos con ellos para serlo con nuestros hermanos que nos necesitan. Y hay que reconocer cómo un animal puede ofrecer lo que a nuestra vida le falta; son nuestros amigos y compañeros”, compartió el sacerdote.
Dejando muy claro que las mascotas merecen la importancia que les corresponde y, a su vez, son seres que demuestran la empatía que se debe tener hacia el ser humano.
Concurrencia. El evento, de nueva cuenta, tuvo una gran respuesta de la ciudadanía, quienes demostraron su cariño por sus mascotas, poniéndolas en las manos de Dios y proyectando amor incondicional, al mismo tiempo que fidelidad.