Escuelas con agua está sentando las bases para el futuro en la zona, al implementar sistemas para captar agua dulce y clorizarla en tinacos, lo que permitirá su consumo en el futuro.
La escasez de agua se está convirtiendo en un problema presente y futuro en México, y en estados y municipios desérticos comienza a generar preocupaciones, obligando a buscar alternativas urgentes.
Un programa en especial está llamando la atención de los ambientalistas: la captación de agua de lluvia y su tratamiento para usos de higiene, como una primera opción y una solución viable para el consumo humano.
Escuelas con agua. Arca Continental dio el primer paso al poner en marcha un sistema para captar la mayor cantidad de agua durante la temporada de lluvias en los planteles escolares y su aprovechamiento en las actividades diarias.
Jorge Santos Reyna, presidente de la Fundación, inauguró en Piedras Negras la escuela 100 en contar con este moderno sistema.
“El proyecto surgió del compromiso de dar acceso a agua a personas de la comunidad estudiantil con acciones en conjunto para poder crecer a través de un mejor cuidado del agua”, señaló.
Las cifras. El programa nació en 2021 en una escuela rural secundaria, que requería urgentemente alternativas de agua para su proceso educativo.
A la fecha, se han implementado sistemas en 100 escuelas del país, beneficiando a 36 mil estudiantes.
Cada escuela tiene capacidad instalada para almacenar 20 mil litros de aguas pluviales que, en conjunto, generan 23 millones de litros de agua cada año.
La fundación proyecta 190 escuelas adicionales en las distintas regiones de México durante 2024 y 2025, incluyendo algunas más en Coahuila.
Durante el evento en Piedras Negras, el gobernador Manolo Jiménez Salinas le solicitó al presidente de Arca Continental más escuelas con ese sistema, a lo que accedió, incluyendo una en esta frontera.
Cómo funciona. Karla Gutiérrez, especialista ambiental de la empresa, explicó que el procesamiento se basa en tres filtros o tres pasos.
Uno: captación de agua que va directo a tinacos, con paso a través de hojas para detener los sedimentos grandes.
Dos: una vez retenida el agua dentro de los tinacos, se inicia un proceso de cloración para que el agua esté libre de virus, hongos y bacterias. Además, se instaló una pichancha flotante o reductor de turbulencias.
Tres: otro sistema permite que el agua se distribuya correctamente hacia las llaves de paso.
Se agrava la falta de agua. Algunos expertos consideran que el problema de agua en Coahuila es grave y debe ser atendido, ya que cada región tiene un grado de riesgo diferente.
La escasez de agua en Coahuila se considera de nivel medio, lo que significa que hay un 20% de probabilidad de que se produzcan sequías en los próximos 10 años.
Entre los problemas se encuentran la escasez y calidad del agua, la sobreexplotación de aguas subterráneas y el saqueo del agua por empresas refresqueras, cerveceras y agroindustrias, que son las que más extraen agua.
Fugas en Piedras Negras. En esta frontera se vivió una severa crisis de agua por las constantes fugas en el sistema de abastecimiento y la explotación excesiva de los acuíferos.
Un estudio de disponibilidad de agua en el acuífero “Allende-Piedras Negras”, elaborado por la Comisión Nacional del Agua, confirma que se encuentra “sin disponibilidad”, es decir, se extrae más agua de la que recibe el acuífero en todo el año.