Una de las áreas históricamente descuidadas en la medicina preventiva y la salud mental es la prevención del suicidio. La identificación de síntomas, así como la elaboración de diagnósticos y tratamientos adecuados, sigue siendo una de las grandes tareas pendientes del sector salud en México.
### Números alarmantes
Los datos de la Secretaría de Salud a menudo distan mucho de la realidad sobre el suicidio en el país. Según el sistema de vigilancia epidemiológica, se reporta una disminución en 2024 en el número de personas atendidas por lesiones autoinfligidas y tentativas de suicidio. Hasta la semana epidemiológica 32 de 2024, se registraron 351 casos de lesiones autoinfligidas, una cifra superior a los 277 casos del mismo periodo en 2023. Sin embargo, los intentos de suicidio han disminuido de 4,269 en 2023 a 3,285 en 2024.
### Casos por estado
En la misma semana, se reportaron 1,400 mujeres y 631 hombres con ideaciones suicidas, totalizando 2,031 personas, cifra que también es superior a la de 2023. Jalisco lidera con 376 intentos de suicidio, seguido de la Ciudad de México y el Estado de México, con 262 y 220 casos, respectivamente.
### Paradojas en los registros
Las estadísticas revelan dos paradojas: primero, el número de suicidios anuales es mucho mayor que los casos reportados por las instituciones de salud; segundo, aunque más mujeres buscan atención, los hombres representan la mayoría de los suicidios, siendo principalmente jóvenes. Entre 2014 y 2023, se registraron 51,199 suicidios, 80.9% de los cuales fueron hombres.
### Señales de alerta
A menudo, las personas que intentan suicidarse emiten señales claras que pueden ser pasadas por alto. La atención de familias, escuelas y comunidades es fundamental para reconocer estas señales y proporcionar la atención clínica y psicológica necesaria. Se requiere una mejora en los recursos de salud tanto en el sector público como en el privado.
### La “verdad” de los datos
La frase “los datos no mienten” no siempre se aplica, especialmente en estadísticas sobre suicidio, donde hay una considerable subestimación de los intentos. Esto se debe a factores culturales que dificultan que los hombres hablen sobre sus problemas. Es urgente mejorar la calidad de los servicios de salud en este ámbito, dado que el suicidio se ha convertido en una de las principales causas de incapacidad laboral a nivel global, con costos humanos incalculables.