A raíz de los múltiples casos de CTE en la NFL, la liga comenzó a buscar la forma de proteger la salud de los jugadores
Uno de los jugadores más icónicos de los Green Bay Packers, Brett Favre reveló que sufre de Parkinson, una enfermedad derivada de las diversas conmociones que padeció durante los 20 años de carrera profesional que sostuvo en la NFL, el diagnóstico de “El General” puede traducirse en padecimientos similares a los del CTE (Encefalopatía traumática crónica).
Tras su retiro en 2009, Favre presentó síntomas de CTE, tales como la pérdida de memoria a corto plazo y el tartamudeo, sin embargo, el poseedor del récord de más inicios consecutivos en la historia de la NFL con 321 no es la primera ni única víctima de esta enfermedad.
Andre Waters falleció con un cerebro igual al de un hombre de 80 años con Alzheimer
El histórico defensivo de los Philadelphia Eagles y los Arizona Cardinals sufrió una de las muertes más trágicas en la historia de la NFL, ya que durante los 11 años de carrera profesional dentro de los emparrillados, los golpes a la cabeza fueron una constante en la vida de Waters, situación que provocó un cuadro de depresión severo.
En 2006, el ex Safety se suicidó y tras un estudio cerebral post mortem, se determinó que el cerebro de Andre Waters degeneró en el de un hombre de 80 años con enfermedad de Alzheimer.
Mike Webster, el primer caso identificado de manera oficial con CTE
Uno de los líderes de la “Cortina de Acero” y ganador de cuatro Super Bowls con los Pittsburgh Steelers, Mike Webster representó toda una revolución en la liga ante un problema que antes pasaba desapercibido, ya que ‘Iron Mike’ fue el primer jugador de futbol americano en padecer de CTE.