Un estudio reciente sugiere que tener un esposo o novio con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) en la edad adulta puede afectar negativamente la salud mental de las mujeres.
Según los investigadores, cerca de 3 de cada 5 mujeres (59 %) con parejas masculinas que padecen TDAH presentaron síntomas de depresión. Esta tasa es comparable a la de quienes cuidan a seres queridos con afecciones como el autismo, trastornos cardíacos, Alzheimer o insuficiencia renal.
El estudio también reveló que estas mujeres experimentaban una menor calidad de vida en comparación con quienes tenían parejas con otros problemas de salud como esquizofrenia, depresión, ansiedad o un accidente cerebrovascular.
"Nuestros hallazgos destacan que el TDAH afecta no solo al individuo, sino también a sus relaciones cercanas", explicó el equipo de investigación liderado por Adina Maeir, profesora de la Facultad de Terapia Ocupacional de la Universidad Hebrea de Jerusalén, Israel. El equipo abogó por un enfoque más integral del tratamiento que incluya a las parejas, para mejorar su bienestar general.
El estudio incluyó a 100 parejas heterosexuales israelíes, donde el hombre había sido diagnosticado con TDAH. En promedio, las parejas llevaban juntas unos nueve años; 65 estaban casadas y 35 convivían.
Ambos miembros de la pareja respondieron cuestionarios sobre los síntomas del TDAH del hombre, mientras que las mujeres también fueron evaluadas en términos de depresión, calidad de vida y bienestar. Los resultados mostraron que, cuanto más graves eran los síntomas del hombre, mayor era la probabilidad de que la mujer experimentara depresión y menor calidad de vida. Sin embargo, aquellas mujeres cuyas parejas tomaban sus medicamentos de manera constante reportaron una mejor calidad de vida.
El equipo de investigación destacó que estos hallazgos coinciden con estudios previos que indican que el tratamiento farmacológico del TDAH puede mitigar sus síntomas y reducir su impacto en la vida diaria. Además, sugirieron que los tratamientos también podrían beneficiar indirectamente a las parejas.
El estudio también señaló que las mujeres que se dedicaban tiempo a sí mismas —practicando ejercicio, disfrutando de actividades sociales o cuidando su bienestar— mostraban menos síntomas depresivos y una mejor calidad de vida, a pesar de tener una pareja con TDAH.
Publicado en la revista *Journal of Attention Disorders*, el estudio subraya la relación positiva entre las actividades enfocadas en la salud y el bienestar mental de las mujeres, incluso cuando enfrentan los desafíos derivados del TDAH en sus parejas.