La entrada de Vinícius Junior desde el banquillo fue clave para la remontada del Real Madrid contra el Espanyol en el Santiago Bernabéu (4-1), tras un autogol de Thibaut Courtois. Los goles de Dani Carvajal, Rodrygo, Vinícius y un penalti de Kylian Mbappé sellaron la victoria.
Aunque Vinícius no está en su mejor nivel, su presencia sigue siendo determinante. En un día de rotaciones, ingresó desde el banquillo para cambiar el rumbo de un partido que se complicó tras un error de Courtois. La goleada resultante mostró señales de mejoría en el juego del equipo.
El Real Madrid, que ha tenido inicios de partido inciertos, comenzó a mejorar en la segunda mitad, gracias a la contribución de Modric, la movilidad de Bellingham y el talento de Arda Güler. Sin embargo, fue necesario recurrir a Vinícius para asegurar la remontada.
Vinícius, aunque no en su mejor forma, demostró su capacidad para influir en los partidos saliendo desde el banquillo. Su entrada fue crucial para revertir un marcador adverso, con el rival agotado y el brasileño listo para brillar en el momento decisivo.
Rodrygo, por su parte, jugó desde la izquierda, mientras que Güler destacó por la derecha, creando ocasiones de gol y asistiendo a sus compañeros. Aunque el Espanyol resistió en la primera mitad, finalmente el Real Madrid logró imponerse.
El partido también dejó ver un Espanyol defensivo que aguantó bien hasta la segunda parte, pero la presión del Madrid fue inquebrantable. Courtois cometió un error que permitió el gol rival, pero Vinícius rápidamente restableció el empate, lo que condujo a una avalancha de ataques que culminaron en la victoria del Real Madrid.