Una mujer francesa experimentó una reacción grave después de teñirse el cabello, que temporalmente afectó su visión. Según los médicos, la paciente comenzó a sufrir desprendimiento de retina y pérdida de visión poco después de usar un tinte para el cabello que contenía ciertos químicos. Afortunadamente, su visión se restableció con el tiempo tras dejar de usar el producto y pudo continuar tiñéndose el cabello de forma segura con otros ingredientes.
El caso fue documentado por los médicos del Hospital Edouard Herriot y del Centro Oftalmológico LEO en Francia, y publicado en la revista *JAMA Ophthalmology*. La mujer de 61 años acudió a consulta después de notar visión borrosa en ambos ojos. Las pruebas confirmaron que sus síntomas eran consecuencia de daño en la retina, que es la capa de células en la parte posterior del ojo responsable de convertir la luz en información visual para el cerebro.
No había antecedentes médicos que explicaran este daño retinal, conocido como retinopatía, y los médicos no encontraron otras causas comunes como infecciones o cáncer. Sin embargo, la paciente había usado un tinte para el cabello que contenía parafenilendiamina justo antes de que comenzaran sus síntomas.
**¿Qué es la parafenilendiamina?**
La parafenilendiamina es una sustancia química del grupo de las aminas aromáticas. Los médicos ya estaban familiarizados con casos recientes de mujeres que habían desarrollado retinopatía relacionada con el uso de tintes que contenían estas aminas aromáticas, una condición que se conoce como RAHDAA. Dado el momento de aparición de los problemas oculares y la ausencia de otras explicaciones, los médicos concluyeron que la mujer había desarrollado su propio caso de RAHDAA.
RAHDAA comparte similitudes con otra forma de retinopatía asociada con el uso de ciertos medicamentos contra el cáncer que inhiben las proteínas MEK. Tanto estos medicamentos como las aminas aromáticas pueden dañar la retina al interferir con un proceso esencial para la supervivencia y el equilibrio de las células del epitelio pigmentario retinal. Aunque la condición parece ser rara, las personas con lesiones en el cuero cabelludo al usar tintes con aminas aromáticas podrían estar en mayor riesgo, aunque la mujer no presentaba heridas visibles.
El desenlace para la paciente fue positivo. Dejó de usar el tinte inmediatamente, y en un plazo de cuatro meses, su visión volvió a la normalidad sin signos de desprendimiento de retina. En un chequeo realizado cuatro años después, informó que había cambiado a un tinte sin aminas y las pruebas confirmaron que su visión seguía siendo buena, aunque se observaron algunos cambios asintomáticos en la retina debido al tinte.
Aunque estos casos son “presumiblemente raros”, los autores del informe subrayan la importancia de que otros médicos consideren los tintes con aminas como una posible causa de problemas retinales, especialmente cuando las pruebas iniciales no ofrecen una explicación clara.