Los grupos delictivos que operan en el estado de Guanajuato han innovado más allá de las fosas clandestinas.
Los grupos delictivos que operan en el estado de Guanajuato han innovado más allá de las fosas clandestinas en los mecanismos que utilizan para desaparecer los cuerpos de sus víctimas y que estos no puedan ser encontrados, ello arrojándolos en pozos de agua, canales de riego y hasta en minas en desuso en la capital del estado.
De acuerdo a cifras oficiales, han sido recuperados con corte al mes de agosto de 2024 un total de 70 cuerpos que habían sido arrojados al interior de pozos de agua y orificios en desuso, inclusive en Guanajuato capital se han dado ya los primeros hallazgos de cuerpos abandonados en las “bocas de mina” que en su momento fueron explotadas para la extracción de metales, pero hoy están en abandono. Así lo explicó en entrevista Héctor Díaz Ezquerra, titular de la Comisión de Búsqueda de Guanajuato.
”Si se han localizado, han sido bastantes. Este fenómeno debe tener aproximadamente unos dos años y medio de que se empezaron a ubicar. Van alrededor de 70 cuerpos que se han encontrado en este sentido, es diverso porque se han encontrado en todo el estado, pero hay sobre todo hallazgos en la zona Laja-Bajío”
“Hemos encontrado también cuerpos en pozos en desuso, hemos visto que la delincuencia también se va diversificando de alguna manera, los hemos encontrado en pozos en desuso, en riegos que ya no se utilizan, se han encontrado cuerpos ya en boca minas en la ciudad capital, ahora sí que la delincuencia se va ampliando y nosotros estamos en la obligación de tratar de ir adelante en estos hallazgos”. explicó.