El mexicano Santiago Giménez y el Feyenoord empataron a un gol ante el Sparta en el Derbi de Róterdam, Santy no pudo anotar.
Fue uno de los partidos más discretos que ha tenido Santiago Giménez en Europa, justo cuando su futuro todavía sigue sin definirse con el Feyenoord. En los 78 minutos de juego en los que participó antes de ser relevado, el delantero mexicano no disparó ni una sola vez a portería, no contó con ninguna oportunidad clara y se fue en blanco en la tercera jornada de la Eredivisie ante el Sparta en el Derbi de Róterdam. Eso ocasionó que su equipo sólo empatara ante su clásico rival. 1-1 final.
La rivalidad de la región no pudo empezar de otra forma. Fue con máxima presión por parte del cuadro visitante que de inmediato mostró sus armas ofensivas. Igor Paixao avisó primero con un remate que se fue bastante alto y una jugada después David Hancko. El central aprovechó la táctica fija para un remate de cabeza que pegó en el poste izquierdo, todo en menos de 10 minutos.
Santiago Giménez tuvo un complicado y muy discreto primer tiempo. La zaga rival lo contuvo de gran forma y no lo dejó hacer nada, apenas tocó algunos balones y no tuvo ninguno modo para rematar directo bajo los tres postes.
Pasada la media hora, el equipo de casa tomó la ventaja de forma sorpresiva y sin tanta insistencia. El gol fue completamente fortuito. Un largo trazo del portero y capitán Nick Olij llegó hasta el otro lado del campo donde el guardián visitante intentó cortarlo, pero lo hizo mal, le dejó el balón al delantero Tobias Lauritsen, quien cedió para Camiel Neghli. El argelino mandó un disparo lejano que botó exactamente dentro de la cabaña.
El complemento empezó con la misma tónica. El conjunto de fuera con más ganas y disposición de anotar, mientras que su rival sólo aguantó, parecía que sólo un tanto de diferencia era suficiente, situación que terminaron por pagar con el empate.