Grupos criminales controlan carreteras y comunidades en la frontera sur.
Grupos criminales en disputa tienen bajo control las principales ciudades, carreteras, el comercio y la frontera de Chiapas con Guatemala.
En la región, militares han sido blanco de ataques a balazos y con drones.
Poblaciones enteras son amenazadas para colaborar en bloqueos que impidan el paso de fuerzas federales, mientras que familias huyen en caravanas en medio de balaceras.
Comunidades están convertidas en pueblos fantasmas, mientras que en otras hay compras de pánico de comida y gasolina, también comercios cerrados y calles solitarias.
Los narcobloqueos en la frontera con Guatemala son orquestados por al menos tres grupos criminales que pelean el control de ese territorio.
Uno de los puntos críticos es Chicomuselo, escenario de confrontaciones entre miembros del "Cártel de Chiapas y Guatemala", integrado por desertores del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), y el Cártel de Sinaloa, que desde hace unos meses busca quitarles el control.
Al menos otros cuatro municipios, Ángel Albino Corzo (Jaltenango), Motozintla, Frontera Comalapa y Amatenango, están a merced del narco y la violencia se extendió a El Porvenir, Comalapa, Mazapa de Madero, Bejucal, La Grandeza, Bellavista, Siltepec y La Concordia.