El fallo sobre la quiebra de AHMSA podría tardar meses por el paro nacional en el Poder Judicial y la carga de trabajo de la Jueza Ruth Hurta García, advierten CMIC y Coparmex.
La sentencia de la Jueza Ruth Hurta García sobre la quiebra o no de AHMSA parece que se retrasará por un tiempo, que pueden ser meses, pues la operación de los juzgados del Poder Judicial están sin trabajar por el paro de labores a nivel nacional, además depende del cúmulo de trabajo que tenga la Jueza por resolver, coincidieron en opinar los presidentes de las cámaras CMIC y Coparmex.
“Como anillo al dedo le quedó a la Jueza Ruth”, comentó Humberto Prado, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción al hacer referencia al movimiento de los trabajadores del Poder Judicial, lo que para la decisión sobre Altos Hornos de México.
Movimiento de trabajadores judiciales afectaría resolución sobre AHMSA
Mario Coria Roehll, presidente de Coparmex, señaló que en el caso de AHMSA todo es posibilidad de que suceda por lo que no descarta que haya un interés de cierta parte del caso de que la decisión de la quiebra se dé hasta después del cambio de administración federal, que es el primero de octubre.
Agregó que, “La demanda de AHMSA es como cualquier otra y se puede tardar en dar una sentencia puede llegar mañana, dentro de 15 días o meses, no hay plazo. Puede haber sensibilización de la Jueza sobre la afectación a los trabajadores, pero tiene otros expedientes y tiene que estudiar y revisarlos. Si se tiene intención de hacerlo hasta el cambio de gobierno, puede ser, es sospechoso, pues hoy todo es una posibilidad”.
Obreros de AHMSA prefieren que se reactive a ir a otra empresa
Prado estimó que no solo el paro de los trabajadores detiene el destino de AHMSA, sino también el trabajo que tenga la Jueza de otros casos, pues el juicio de Altos Hornos es como cualquier otro para ella y tiene que dar salida conforme los vaya estudiando y decidiendo.
Posiblemente, es más desesperante para los trabajadores que los acreedores el saber que tienen que esperar más tiempo para que haya una determinación sobre la acerera y que se retrase más el pago de la liquidación que van a recibir, porque lo que se quiere es que sea rápido, comentó el presidente del organismo.
En cambio, dijo que para los acreedores es menos el impacto del retraso, porque saben que tal vez no van a recibir nada, aunque sí esperan que la empresa comience a operar y tengan trabajo y comience a generarse economía.