El bicarbonato de sodio tiene muchas aplicaciones en el campo de la belleza.
Seguramente habrás notado que varios productos de skincare incluyen al bicarbonato de sodio como uno de sus principales compuestos. En gran parte, esto se debe a su eficacia para remover las impurezas de la piel.
De acuerdo con el portal especializado News Medical Today, dicho compuesto es una alternativa a los productos comerciales. Ayuda a balancear el pH, desobstruir los poros y exfoliar nuestro cutis.
¿Qué efecto tiene el bicarbonato de sodio en la cara?
El principal atractivo del bicarbonato de sodio es su capacidad para remover la suciedad que se acumula en la piel. Recordemos que la contaminación ambiental, la falta de higiene y el exceso de grasa ocasionan brotes de acné en nuestra cara.
Según explica el blog de Loreal París, este producto es alcalino lo que permite neutralizar los ácidos de la capa más superficial de la dermis, abrir los poros y eliminar el exceso de células muertas.
Al utilizarlo como limpiador casero podríamos conseguir un cutis más terso, suave y radiante. Gracias a su composición, el bicarbonato de sodio actúa como exfoliante natural y su efecto es menos abrasivo que el azúcar o el café.
Otros usos que se le dan es: como blanqueador de dientes, para remover callos, a manera de aclarante junto con ingredientes como el limón, para sacar el tinte permanente del cabello y como regulador de sebo en el cuero cabelludo.
¿Cuántas veces se puede lavar la cara con bicarbonato?
Para lavar tu cara con bicarbonato de sodio, se recomienda mezclar 2 cucharadas de este compuesto con un poco de agua. Luego será necesario revolver hasta conseguir una pasta espesa.
Posteriormente, la mezcla se aplicará de manera gentil sobre el cutis haciendo movimientos circulares. Este proceso debe tener una duración aproximada de 30 segundos. Y el último paso es retirar el excedente con agua tibia. No olvides aplicar tu crema hidratante.
Recuerda que el uso del bicarbonato debe ser moderado. La Asociación Colombiana de Dermatología y Cirugía Dermatológica advierte que dicha sustancia podría debilitar la barrera de protección natural de la piel.
En exceso, las sustancias fuertes y alcalinas ocasionan irritación (con síntomas como picazón, sequedad, aparición de manchas rojas y sensación de ardor). De igual manera, no se recomienda su uso para las personas que tienen un enfermedad de la piel (por ejemplo, dermatitis o eczema).