El astro argentino se mostró sorprendido por lo sucedido en el primer partido de futbol varonil de los Juegos Olímpicos
Lo que sucedió este miércoles 24 de julio quedará marcado para la historia del futbol y Lionel Messi lo sabe.
El choque entre Argentina y Marruecos, de los Juegos Olímpicos de París 2024, ha quedado marcado por las polémicas decisiones que se tomaron durante el primer partido del futbol varonil en Francia.
La primera sorpresa del encuentro fue que se agregaron 15 minutos luego de los 90 de tiempo regular.
En el añadido, Argentina logró empatar 2-2, lo hizo sobre la hora y en la que aparentemente era "la última jugada del compromiso".
Tras la anotación albiceleste, de nueva cuenta hubo invasión de campo por parte de aficionados de Marruecos y no sólo eso, también se lanzaron objetos a los jugadores sudamericanos, por lo que el juego fue suspendido, algo extraño porque en el sitio oficial de la justa el estatus era "finalizado". Incluso la propia selección de Argentina en sus redes sociales publicó el final del partido con empate.
Pero nada de esto era la realidad.
Casi hora y media más tarde a ese gol del empate argentino, el encuentro se reanudó, ya sin público, y con una decisión tras la revisión en el VAR. Hubo fuera de lugar, por lo que el 2-2 pasó a ser 2-1 y con esto, los marroquíes se quedaron con los tres puntos.