De manera prepotente y arbitraria se introducen en medio de la fila del puente, confrontando a las autoridades, algo que no harían en Estados Unidos, donde podrían enfrentar cargos.
Son recurrentes los problemas que generan los paisanos en la fila del puente. Algunos de estos han sido tan graves que han requerido la intervención de la fuerza pública.
La principal causa es la falta de respeto a las reglas establecidas para regresar a Estados Unidos, intentando colarse en medio de la espera. Esto provoca la indignación de quienes llevan horas esperando su turno, especialmente bajo el intenso calor que azota la ciudad.
Lineamientos. Estos imprudentes intentan quebrantar los lineamientos establecidos solo para manifestar que son ciudadanos americanos, pero así como en su país se respetan los acuerdos, también en México no se les permite hacer lo que deseen.
En cuanto a la vigilancia en los puentes, el jefe del cuerpo de inspectores, Gerardo Velázquez, ha manifestado que se han encontrado con situaciones de insultos e incluso agresiones físicas, detallando intentos de introducirse en la fila en calles como Padre de las Casas, Morelos o Zaragoza. Están muy atentos a esta situación y se les pide que se retiren y esperen su turno como todos los demás.
Se ha registrado el caso de una persona que circuló en sentido contrario por la calle Ocampo para tomar Matamoros y acceder al puente, siendo obviamente retirada.
Los inspectores. Sufren agresiones físicas y verbales por parte de los paisanos. Uno de los inspectores relató un incidente en el que un ciudadano se comportó de manera prepotente al colarse en la fila de manera arbitraria.
Riesgo. A pesar de las peticiones para que se retirara de manera amable, el individuo se negaba e insultaba. Finalmente, se le retiraron las placas y descendió de la unidad, amenazando con rociar gas pimienta al agente.
Esto provocó la intervención de Seguridad Pública debido al riesgo que representaba para la integridad del agente.
Este comportamiento, de haber ocurrido en Estados Unidos, habría resultado en cargos por asalto a un oficial de la ley y una respuesta legal más severa por parte del agente. En México también se establecen leyes y reglamentos que deben cumplirse; de lo contrario, deben enfrentar las consecuencias legales.
Contención. Se han documentado varios casos, como el de un residente norteamericano con raíces en el estado de Guanajuato, que regresaba de sus vacaciones en diciembre.
En esa ocasión, debido a un problema migratorio, se tuvo que esperar hasta 15 horas debido al cierre de un puente por apoyo en la contención de migrantes ilegales. En este contexto, el individuo intentó colarse en la fila, pero fue detenido por un agente de policía después de golpear al oficial. Aunque fue arrestado por unas horas, la sanción podría haber sido más severa en Estados Unidos. Este incidente demuestra las diferencias en las repercusiones legales entre ambos países pudiera venir pudiendo perder la residencia permanente que cada 10 años deben de renovar. Estos incidentes subrayan la necesidad urgente de mantener un orden riguroso y respetuoso en los cruces fronterizos, donde la paciencia y el respeto a las normativas son fundamentales para asegurar un tránsito fluido y seguro. La cooperación entre los viajeros y las autoridades es crucial para evitar situaciones de tensión y conflictos que puedan poner en riesgo la seguridad de todos los involucrados.
Es imperativo que quienes atraviesen estos puntos fronterizos comprendan la importancia de seguir las reglas establecidas, las cuales están diseñadas no solo para organizar la espera, sino también para proteger los derechos y la integridad de cada individuo. La falta de cumplimiento y el intento de colarse en las filas no solo generan frustración entre los que esperan.