Uno de los hospitales pediátricos más grandes de Ucrania, el Okhmatdyt, sufrió daños importantes, igual que otro hospital.
La embajadora de Ucrania en México, Oksana Dramaretska, denunció el “ataque bárbaro” perpetrado el lunes por Rusia en Ucrania, en el que murieron 38 personas, incluyendo cuatro niños, y 190 resultaron lesionadas, y pidió a la comunidad internacional “aumentar la presión” sobre los rusos y suministrar armar a su país, advirtiendo que “la mera preocupación no detiene el terror”.
En una declaración, Dramaretska aseguró que la oleada de ataques contra civiles que tuvo lugar el lunes en Kiev, Dnipro, Kryvyi Rih, Sloviansk y Kramatorsk “no fue una excepción: los objetivos de nuevo fueron zonas residenciales e infraestructura civil”.
Denunció que cerca de 100 instalaciones “resultaron dañadas, entre ellas un hospital pediátrico, viviendas comunes, guarderías, una maternidad, una universidad y un centro de negocios”.
Piden aumentar presión a Rusia tras ataques a infraestructura civil
Uno de los hospitales pediátricos más grandes de Ucrania, el Okhmatdyt, sufrió daños importantes, igual que otro hospital, lamentó.
“Éste es el verdadero rostro de Rusia. Ésta es la verdadera respuesta de [el presidente Vladimir] Putin a todas las misiones y propuestas de paz”, señaló.
Tras calificar el ataque de “bárbaro”, la embajadora dijo que esta acción “exige una vez más al mundo entero, a todos los lideres, que aumenten la presión contra Rusia por todos los medios posibles y reitera la necesidad de suministrar a Ucrania sistemas de defensa aérea adicionales lo antes posible”.
Acusó que “los terroristas rusos deben rendir cuentas por esto” y advirtió que “a mera preocupación no detiene el terror. Las condolencias no son un arma”.
Las fuerzas ucranianas, acotó, necesitan “derribar los misiles rusos para garantizar la seguridad del pueblo ucraniano”.
Este martes, por solicitud de Ucrania, se realiza una reunión de emergencia en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (ONU) para abordar la situación. Rusia rechaza estar detrás de estos ataques y este martes insistió en que las fuerzas rusas sólo atacan infraestructuras militares.
La embajadora Dramaretska finalizó la declaración instando “a todos los países y organizaciones internacionales a condenar enérgicamente el ataque de hoy y rechazar cualquier apaciguamiento del asesino de niños y otros civiles inocentes”.