Un recorrido por los diversos "First Cash" de la ciudad pudo constatar una gran afluencia de clientes. Según Carlos Valdés, un empleado de una Casa de Empeños en plena avenida, "hubo mucha gente la semana pasada". Dice que, con la presente temporada de graduaciones, muchos padres de familia acudieron a empeñar algún artículo de valor o incluso a venderlo. La semana pasada, un papá vendió un motor de gasolina para generar electricidad en 3 mil pesos."
Esta semana bajó la presencia de clientes, pero la mayoría siguen siendo padres de familia preocupados por las graduaciones.
No todos los clientes acuden por dinero prestado, muchos van a comprar un regalo para los graduados. La mayoría de los negocios se venden productos usados o nuevos a buenos precios, mejores a los que exhiben las tiendas de conveniencia o comercios.