Al cumplirse 493 días de haberse anunciado la instalación de una mega planta de Tesla en el municipio de Santa Catarina, el gobierno de Coahuila está dejando escapar la gran oportunidad de arrebatar a Nuevo León dicho proyecto.
“Nos estamos viendo demasiado lentos” al desaprovechar esta coyuntura, marcada por el retraso o indecisión para el arranque de dicha instalación, aseveró el director de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC), Jonathan Flores Pérez.
La posibilidad de que nuestro estado se quede con el complejo industrial “es una oportunidad muy importante”, pero se nos olvida que, “entre estados, siempre estamos compitiendo” por atraer y acaparar inversiones productivas.
“Las entidades federativas compiten finalmente por la inversión extranjera directa, entonces, en este sentido, ¿qué está haciendo Coahuila? Efectivamente, ya nos tardamos, a pesar de que tenemos todo para albergar a Tesla”. Además de que contamos con una infraestructura industrial eficiente, no tenemos problemas de inseguridad, como en otros estados del país que están prácticamente en poder del crimen organizado, estimó Flores Pérez.
Planeada su llegada para enero de 2024, la trasnacional no se ha decidido todavía a invertir en el vecino estado, debido, entre otras razones, a la escasez de agua, lo cual no ocurre en el sureste de nuestra entidad, salvo que aquí “hay una mala distribución”, explicó.
El problema de la sequía en la región, aunado a las reformas estructurales, como la laboral y ahora la del poder judicial, promovidas por el actual gobierno federal desalentaron finalmente a la firma, consideró el economista.
“Algo en lo que se fijan mucho las empresas –refirió– interesadas en establecerse aquí es, primeramente que haya certeza jurídica, asimismo, que se garantice una buena seguridad pública”. “Desafortunadamente, seguimos con el tema de la inseguridad, a lo que se agrega la escasez de agua potable".