Con este caso ya sería el tercer oficial despedido.
Un nuevo capítulo se ha sumado a la serie de despidos en la Seguridad Pública Municipal, con la reciente baja de un elemento que no logró pasar las pruebas de Control y Confianza, convirtiéndose en el tercer oficial despedido por el mismo motivo.
Este hecho evidencia la rigurosidad en los estándares de confiabilidad y compromiso que se exigen a los agentes encargados de velar por la seguridad de la ciudadanía.
El agente Raúl Campos, quien había sido reincorporado recientemente a la corporación, fue dado de baja tras no superar las evaluaciones correspondientes, sumándose así a la lista de oficiales que enfrentaron la misma situación. Cabe destacar que Campos también enfrentaba un proceso por una presunta extorsión, lo que acentúa la importancia de garantizar la integridad y la ética en el desempeño de las funciones policiales.
Las evaluaciones médicas, toxicológicas, poligráficas, sociales y patrimoniales son medidas implementadas para asegurar la idoneidad y compromiso de los agentes encargados de resguardar la seguridad pública.
Recientemente, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Coahuila comunicó al ayuntamiento de Monclova los resultados de las pruebas realizadas por el Centro Estatal de Evaluación y Confianza, revelando que estos uniformados no lograron aprobar los exámenes que buscan garantizar la confianza y el compromiso de los elementos con la ciudadanía.
Este suceso subraya la importancia de mantener altos estándares de integridad y profesionalismo en las fuerzas de seguridad, así como el compromiso de garantizar la confianza y el servicio óptimo para la protección de la comunidad.
La transparencia y la rendición de cuentas son fundamentales para fortalecer la confianza de la ciudadanía en las instituciones encargadas de velar por su seguridad.