Juegos Olímpicos de Berlín 1936: La victoria de Jesse Owens sobre el racismo
La Alemania nazi aún no daba muestras de racismo ni de autoritarismo cuando se disputaron los Juegos Olímpicos de Berlín 1936. El Comité Olímpico Internacional (COI) había designado a la ciudad de Berlín como sede del evento en 1931, y dos años después Adolfo Hitler asumió el control del país, pero Jesse Owens logró vencerlo.
El objetivo del dictador era mostrar la imagen de una Alemania pacífica y tolerante durante la justa olímpica, aunque sus palabras mostraban lo contrario. Consideraba que la raza blanca era superior a la negra.
“Las personas cuyos antecedentes procedían de la jungla eran primitivas. Sus físicos eran más fuertes que los de los blancos civilizados y, por lo tanto, deberían ser excluidos de los Juegos futuros”, mencionó el dictador.