"Desde que yo me acuerdo soy niña".
Originario de Fresnillo en Frontera, Coahuila en el año 1949 sin miedo al machismo y las represalias que podría haber en su contra Esteban Fierro aceptó a la edad de 10 años que sus preferencias sexuales eran distintas a las de los demás niños, pues él adoraba jugar a las muñecas, usar vestidos y actuar como una mujer.
Aunque nació en un ejido en donde las costumbres eran arraigadas, su familia lo protegió y es por ello que vivió plenamente sin temor a mostrar quién verdaderamente era y es.
Hoy en día, a la edad de 75 años se define como una persona transgénero miembro de la comunidad LGBT +.
En junio se conmemora el mes del orgullo que tiene como objetivo rendir homenaje al levantamiento de Stonewall en junio de 1969 en la ciudad de Nueva York, evento que ayudó a impulsar el movimiento moderno por la lucha de los derechos de los homosexuales, es por ello que, Esteban Fierro decidió compartir su experiencia con periódico El Tiempo con el fin de motivar a quienes aún tienen temor de mostrar al mundo entero lo que sienten.
Nació en una época en donde mostrar sus preferencias homosexuales podría tener repercusiones negativas ¿Tuvo miedo?
“No, jamás, sé que había machismo y todavía hay y mucho, pero yo afortunadamente tuve a una madre y padre que siempre me protegieron”.
Desde niño descubrió su verdadera identidad ¿Cómo fue su niñez?
“Fui un niño muy aceptado por los padres y hermanos, tenía mis muñecas de garra, las hacía en el rancho con las mazorcas de maíz, se los ponía como vestiditos entonces fue una infancia muy blanca, ingenua, infantil pero muy bonita”.
Debido a sus preferencias sexuales siendo un niño ¿Alguna vez fue motivo para ser señalado en su familia?
“No a mí nunca me hicieron eso, yo desde muy chiquito me mostré como soy y nunca me vieron con indiferencia cuando tenía a mi madre en mi infancia yo jugaba a las muñecas y ella me ponía sus vestidos, siempre me caía porque me ponía sus vestidos o faltas largas y me tropezaba, pero si la gente decía algo en la calle a mí no me importaba quienes en verdad me importaban era mi familia y nunca fue así porque ellos me querían tal y como yo era sin filtros o mostrando algo que a mí no me hiciera feliz ellos querían lo mejor para mí”.
La comunidad LGBT+ llega a ser señalada o agredida en las calles ¿Ha vivido esto recientemente?
“Sí, hay veces que voy por la calle y van dos o tres muchachos de quince o diecisiete años y me gritan vulgaridades o groserías insultándome, pero yo ni les hago caso, hay de todo, pero todo está en ti porque sí les contestas, caes en su juego que hueva estar peleando”.
¿A qué se dedicó en su vida laboral?
“Yo fui estilista, me gustaba mucho cortar el cabello, en Frontera muchos me conocen como Estebanet así me dicen. Miles de gentes iban para que yo los atendiera en mi estética”.
Este mes se realizan diferentes marchas para defender a su comunidad ¿Por qué?
“Nosotros hacemos la marcha gay para luchar por lo que somos y no para que no seamos discriminados, me ha tocado ir cuando está lleno de mucha gente. Cada vez se llena más, es impresionante. Antes muchos decían van a ser conejillos de India y cuando anden marchando los van a matar, pero yo decía: si me matan, pues me muero de algo bueno, sería por defender la causa y defender los derechos de los que vienen más adelante”.
Existen hombres que se avergüenzan en sentir atracción por otros varones ¿Qué piensa de eso?
“Es cierto hay homosexuales que se casan con mujeres por orden de los papás que dicen mis hijos son hombres, pero en lugar de vivir bien son desgraciados toda su vida, porque se casan y están con sus mujeres e hijos, pero el día que salen de parranda o de fiesta van y se acuestan con dos, tres hombres y lo único que están haciendo es engañándose a ellos, a sus padres y a su esposa e hijos y todo por el orgullo soberbio y vanidoso del papá o la mamá, se vive en un machismo total”.
¿Qué consejo les da a quienes tienen miedo de mostrarse cómo son?
“Sean felices y no pierdan el tiempo porque, si fingen algo que no son nunca, van a estar a gusto en sus vidas y a este mundo se viene a ser feliz”.