El entrenador de Chile, el argentino Ricardo Gareca, aseguró que está “enfocado” en que la selección chilena tenga un buen inicio en la Copa América en el clásico del Pacífico ante Perú, su antigua selección.
La pregunta más repetida al Tigre Gareca en la conferencia de prensa en vísperas del encuentro por la primera fecha del Grupo A fue sobre la sensación de tener que enfrentar a la selección que dirigió entre 2015 y 2022.
La respuesta fue la misma en todos los casos, Gareca aseguró “estar muy enfocado” en el debut de la Roja en la Copa América y en analizar a Perú para armar el equipo que disputará el encuentro.
“Eso me ocupa la cabeza, no más que eso, más allá del pasado que pude haber tenido y que guardo un gran cariño por cómo me trataron y por todos los años vividos”, sostuvo.
El argentino señaló que algo que “nunca va a cambiar” es el agradecimiento a la gente peruana por el trato recibido, aunque insistió en que su foco está en hacer un buen encuentro.
“Lo emocional mío pasa estrictamente por presentar al mejor equipo para el inicio de la copa, estar totalmente enfocado en este nuevo desafío”, zanjó.
Sus expectativas para el encuentro son muchas, a sabiendas de que Chile está en “un grupo difícil, complicado, pero confiando en hacer una buena copa”.
Para Gareca, el partido, que se disputará en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, será especialmente complicado “por ser un clásico” pues “lo viven muy intensamente todos”.
Con todo, consideró que en un clásico “no hay favoritismo, hay que demostrarlo dentro del campo de juego”.
Gareca expresó su satisfacción por el estado en el que llegarán sus dirigidos al partido y se reservó la alineación que presentará ante Perú.
El estratega recordó que la Copa América supone el inicio de nuevos procesos para ambas selecciones, que tienen “cosas por demostrar, por mejorar” y el lance les ayudará a sacar “conclusiones”.
Chile y Perú no tuvieron un buen arranque en las eliminatorias sudamericanas del Mundial de 2026, en las que la Roja va octava y la Blanquirroja ocupa el décimo y último puesto, lo que les ha costado cambiar de técnicos en el camino.