Aunque Monclova cuenta con diversos cuerpos de rescate, hace un llamado a todos para que participen en estos cursos de capacitación.
Con el avance vertiginoso de la tecnología automotriz, los cuerpos de rescate enfrentan desafíos cada vez más complejos. Anselmo González Uresti, un veterano rescatista del cuerpo de Rescate de Águilas Doradas de Monclova, enfatiza la crucial necesidad de formación especializada en técnicas de extracción vehicular.
La sofisticación de los autos modernos, equipados con tecnologías avanzadas como bolsas de aire en múltiples ubicaciones, requiere que los equipos de emergencia se actualicen continuamente para garantizar la seguridad tanto de los rescatistas como de las víctimas atrapadas en accidentes.
Desafíos en el rescate vehicular moderno. En Monclova, los equipos de rescate se enfrentan a una creciente variedad de situaciones debido a la incorporación de nuevas tecnologías en los vehículos. “Los avances en la construcción de autos, como la inclusión de bolsas de aire en los costados y estructuras más complejas, demandan un conocimiento profundo y actualizado de las técnicas de rescate”, comenta Anselmo González Uresti. Su experiencia trabajando en Monterrey y colaborando con la Cruz Verde le ha permitido ver de primera mano los riesgos asociados con la falta de capacitación adecuada.
La evolución de los autos, especialmente los híbridos y eléctricos, presenta retos específicos. Estos vehículos están diseñados con componentes de alta tensión, materiales ligeros pero resistentes, y sistemas de seguridad que, si no se manejan correctamente, pueden provocar lesiones graves durante las operaciones de rescate.
Capacitación especializada. González Uresti subraya la importancia del “Curso para Técnico en Extracción Vehicular (TEV)”, esencial para la profesionalización continua de los rescatistas. Este curso está diseñado para proporcionar conocimientos teóricos y prácticos necesarios para llevar a cabo rescates eficientes y seguros en accidentes vehiculares.
Objetivos del Curso TEV: Protocolo TEV – Control de riesgos y seguridad en la operación: Establecimiento de procedimientos estandarizados para evaluar y mitigar los riesgos durante las operaciones de rescate.
Revisión del equipo de protección personal: Verificación y mantenimiento del equipo de seguridad utilizado por los rescatistas para garantizar su integridad durante las intervenciones.
Reconocimiento de equipos hidráulicos y herramientas: Familiarización con las herramientas especializadas utilizadas en la extracción vehicular, como las quijadas de la vida.
Estructura del vehículo y dinámica de colisión: Comprensión de la estructura interna y externa de diferentes tipos de vehículos y cómo esto afecta las técnicas de rescate.
Estabilización vehicular y técnicas de acceso: Métodos para asegurar el vehículo de manera estable y crear accesos seguros para la extracción de víctimas.
Práctica de protocolo TEV y manejo de herramientas: Ejercicios prácticos para aplicar el protocolo de rescate y utilizar las herramientas de manera efectiva.
TRIAGE STAR: Técnica de clasificación rápida de pacientes basada en la gravedad de sus lesiones para priorizar la atención médica.
Técnica de extracción del paciente: Procedimientos para liberar a las víctimas de manera segura y eficiente, minimizando el riesgo de agravar sus lesiones.
Casos reales y lecciones aprendidas. Durante su carrera en Monterrey, González Uresti ha visto casos en los que la falta de capacitación adecuada resultó en accidentes durante las operaciones de rescate. “He presenciado cómo las bolsas de aire, al no ser desactivadas correctamente, se desplegaron accidentalmente durante el uso de equipos hidráulicos, causando lesiones a los rescatistas y poniendo en peligro a las víctimas atrapadas”, relata.
Estos incidentes subrayan la necesidad imperiosa de que los rescatistas comprendan a fondo las características de los vehículos modernos. La falta de conocimiento sobre la ubicación de los componentes de seguridad y las técnicas adecuadas de extracción puede transformar una situación de rescate en un escenario más peligroso.
Autos híbridos y eléctricos. Con la llegada de autos híbridos y eléctricos, los rescatistas se enfrentan a nuevos desafíos. Estos vehículos están equipados con baterías de alta tensión y sistemas de seguridad complejos que requieren una comprensión detallada para evitar electrocuciones y otros riesgos asociados. “Es esencial que los rescatistas se capaciten en las particularidades de estos vehículos para asegurar una intervención segura y eficiente”, enfatiza González Uresti.
El curso TEV incluye módulos específicos sobre la identificación y manejo seguro de componentes de alta tensión y otros elementos críticos en vehículos híbridos y eléctricos. La capacitación también abarca el conocimiento de los sistemas de propulsión y los materiales utilizados en la construcción de estos autos para planificar la extracción de manera segura.
La capacitación en técnicas avanzadas de extracción vehicular no solo beneficia a los rescatistas al mejorar su seguridad, sino que también optimiza la respuesta en emergencias, aumentando la probabilidad de salvar vidas y reducir el trauma en las víctimas. “La formación continua es una inversión en la seguridad de todos. Al estar preparados, podemos enfrentar los desafíos de los accidentes vehiculares modernos con mayor confianza y competencia”, concluye González Uresti.
Aunque Monclova cuenta con diversos cuerpos de rescate, González Uresti hace un llamado a todos ellos para que participen en estos cursos de capacitación. La preparación adecuada y el conocimiento actualizado son cruciales para manejar las emergencias vehiculares en un entorno donde los autos son cada vez más complejos y sofisticados.
La actualización constante en técnicas de extracción vehicular y el conocimiento de la estructura de los autos modernos son esenciales para garantizar la seguridad en las intervenciones y proporcionar una atención eficaz a las víctimas de accidentes. La profesionalización y formación continua de los rescatistas son fundamentales para adaptarse a los avances tecnológicos y asegurar la protección tanto de los rescatistas como de la ciudadanía.