Campos consideró que el riesgo para los consumidores de esa agua es que no está clorada ni filtrada
Alrededor de 12 pozos de agua operan en la clandestinidad vendiendo agua en pipas, denunció Eduardo Campos, gerente del Sistema Intermunicipal de Agua y Saneamiento (Simas) lo que afecta a los consumidores porque es agua sucia o no clorada y la capacidad de caudal de los acuíferos.
Dijo que esta situación la comunicaron a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) desde hace varios meses, pero no ha habido respuesta de que haga operativos contra ellos, porque no tienen inspectores.
Los pocos se encuentran en la zona urbana de Monclova y Frontera y son particulares, pero Conagua tendría que revisar si tienen los permisos para extraer y, sobre todo, para comercializar el vital líquido, pues para su consumo personal o familiar no hay problema, pero para vender deben de contar con permiso.
A la Conagua le enviaron la ubicación de todos los pozos con coordenadas y fotos de cuando hay fila de pipas llenando para vender.
Campos consideró que el riesgo para los consumidores de esa agua es que no está clorada ni filtrada, como la de Simas y, aunque la usen para tareas en su hogar, seguramente quedarán los sedimentos en los tinacos o donde la junten.