México coincide en que el genocidio también puede perpetrarse en el contexto de conflictos armados.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha anunciado este martes que México intervendrá en la causa abierta contra Israel tras la denuncia presentada por Sudáfrica a finales de diciembre en la que advertía de posible genocidio en la Franja de Gaza.
"México, invocando el artículo 63 del Estatuto, presentó una declaratoria de intervención en el caso relativo a la Aplicación de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio en la Franja de Gaza", indica el comunicado.
México, como país ha ratificado el tratado internacional, "busca intervenir a fin de proporcionar su opinión sobre la posible interpretación del contenido de las disposiciones de la Convención relevante en este caso", señaló en la solicitud.
Esto se produce después de que ordenara el pasado viernes a Israel detenga de inmediato su ofensiva en Rafah en el sur de la Franja de Gaza, después de que Sudáfrica solicitará medidas adicionales tras acusar a Israel de desentenderse de medidas previas dictadas por el tribunal de las Naciones Unidas.
En concreto, la CIJ pidió a Israel que "suspenda de inmediatamente su ofensiva militar y cualquier otra acción en la gobernación de Rafah".
El tribunal también solicitó "mantener abierto el paso a Rafah cuyo control por el lado palestino asumió a principios de mes "para un suministro a gran escala y sin restricciones de asistencia humanitaria".
Sudáfrica sostuvo en una petición el pasado 10 de mayo que las autoridades "israelíes", han despreciado a la CIJ, ya que las medidas provisionales dictadas en enero y marzo por el tribunal han sido "ignoradas" y "violadas" por Israel.
“México coincide en que el genocidio también puede perpetrarse en el contexto de conflictos armados, y que la vulnerabilidad de las poblaciones civiles en tales situaciones, así como la permisibilidad del uso de la fuerza, pueden ser utilizadas para intentar justificar atrocidades y facilitar los medios para cometer genocidio”, señaló el Gobierno mexicano en la solicitud.
Además, subrayó que “reconocer y probar” el elemento de la intencionalidad es “fundamental para prevenir y abordar la grave atrocidad del genocidio, garantizar justicia para las víctimas y mantener los estándares legales internacionales”.
Para esto, sostiene que es necesario examinar bajo esta Convención la negativa israelí del acceso de la ayuda humanitaria a la población civil de la Franja, “en la medida en que crea condiciones de vida calculadas para causar un grave daño corporal y mental a los miembros de un grupo (los palestinos), así como para provocar su destrucción física parcial o total”.
“Las políticas que implican la negación del acceso humanitario resultan en hambruna, que, a lo largo de la historia, se ha utilizado como un medio de guerra y que puede estar estrechamente vinculada con la intención genocida descrita”, agregó México.
Al cuestionarse la interpretación de una convención firmada también por otros Estados que no son los involucrados en el caso (Israel y Sudáfrica), esos terceros países también tienen derecho a intervenir en el proceso y ofrecer su opinión legal sobre cómo debería interpretarse el tratado.
Siguiendo el procedimiento indicado por el reglamento de la CIJ, el tribunal ha invitado ahora a Sudáfrica e Israel a presentar observaciones escritas sobre la solicitud de México.