Manifiesta que el fallo del tribunal internacional confirma el carácter innecesario de la solicitud realizada por el gobierno de México.
El gobierno de Ecuador acogió con beneplácito la decisión unánime de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya de rechazar las medidas cautelares solicitadas por el Gobierno de México con respecto a la invasión de la embajada mexicana en Quito el pasado 5 de abril por parte de la Policía ecuatoriana para detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa, a quien horas antes se le había sido otorgado el asilo.
En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador manifestó que este fallo del tribunal internacional "confirma el carácter innecesario de la solicitud" realizada por el Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
"La solicitud de México se hizo sin tener en cuenta las repetidas seguridades del Ecuador de que brindaría plena protección y seguridad a los locales, bienes y archivos de la Embajada de México, y que permitiría a México retirar todas esas propiedades de los locales y residencias privadas de sus agentes diplomáticos. Ecuador mantiene su posición", señaló Cancillería de Ecuador.
Añadió que "la Corte reconoció la buena fe del Ecuador y dejó en claro que las presentes circunstancias no presentan ningún riesgo para los derechos de México bajo la Convención de Viena".
Subrayó que "Ecuador se mantiene firme en su lucha contra la corrupción y contra la impunidad y en su compromiso con la justicia".
Las medidas cautelares solicitadas por México buscaban que los jueces de la ONU ordenasen a Ecuador respetar y proteger a su personal y sedes diplomáticas, lo que el Gobierno ecuatoriano ya había garantizado por escrito durante las audiencias sobre las medidas cautelares celebradas a principios de mes.