CD. DE MÉXICO.- Por primera vez, la Oposición pudo enfrentar a la mayoría priísta, para evitar la aprobación de un dictamen, en este caso sobre la prohibición de delfinarios en el País, promovida por el PVEM.
A propuesta del PVEM, las reformas a la Ley General de Vida Silvestre, plantean la prohibición de los parques acuáticos donde haya mamíferos marinos, pero al mismo tiempo, señala que éstos pueden seguir funcionando hasta que se dé la muerte natural de los animales.
De acuerdo con los argumentos del Partido Verde, se trata de una industria que deja 130 millones de dólares al año. Al comenzar el debate, las bancadas de los partidos Acción Nacional (PAN), y de la Revolución Democrática (PRD), presentaron mociones suspensivas para evitar la discusión del tema y regresarlo a comisiones. Reclamaron que no hubo el debido proceso parlamentario, que se estaba imponiendo la reforma y que faltaba mayor debate y análisis de la misma.
La votación para aceptar o no las mociones se llevó a cabo por medio del tablero electrónico, el cual registró una votación cerrada. Al finalizar el tiempo de tres minutos, que permitió que llegaran más legisladores al Pleno, registró el resultado de 178 a favor de las mociones suspensivas y 189 en contra, del PRI, PVEM, Nueva Alianza y Encuentro Social. Se dieron otros minutos, para registrar la votación de diputados en viva voz, para los que no alcanzaron a registrar su voto.
El Secretario de la Mesa Directiva, Andrés Fernández del Valle, registró una votación diferente, con 185 a favor y 194 en contra, resultado que fue desconocido por la Oposición. Ante ello, las bancadas del PAN, PRD, Morena y MC dejaron el Pleno en protesta por la forma en que se estaba llevando la votación. Aún así, siguió la sesión y el coordinador del PVEM, Jesús Sesma, defendió en solitario el dictamen ante un Pleno semivacío. En una primera votación, se registraron 202 diputados presentes, por lo que no se cumplió con el quórum de 251 para seguir.
La Presidenta de la Mesa Directiva, Guadalupe Murguía, por reglamento, debió declarar un receso y esperar para volver a hacer una votación, pero, finalmente, debió levantar la sesión.
En el debate previo, los Legisladores de la Oposición, denunciaron el cabildeo de un par de mujeres presionando a los diputados en sus curules para votar a favor del dictamen. "Se me acercó muy coqueta una joven para cambiar el sentido de mi voto", denunció el diputado Adán Pérez, de Movimiento Ciudadano (MC). Antes, Jesús Valencia, del PRD, había denunciado que las cabilderas presionaban a los legisladores con denunciarlos en la opinión pública de que estaban a favor del maltrato animal.
Sofía González Torres, del PVEM, afirmó que debía haber más respeto, porque eran trabajadores del partido. Jorge López Martín, del PAN, dijo que hubo Legisladoras del PVEM las que también cabildearon con los Diputados para lograr la aprobación del dictamen. Al filo de las 16:00 horas, Murguía debió levantar la sesión y citar al Pleno hasta el 18 de abril, luego de las vacaciones de Semana Santa.