Los vuelos de llegada tuvieron que ser desviados a otros aeropuertos, según un vocero del aeródromo.
Las autoridades alemanas cerraron temporalmente este sábado el aeropuerto de Múnich luego de que seis activistas climáticos saltaron una cerca de seguridad y se pegaron a las vías de acceso a las pistas, según funcionarios y medios locales.
Los integrantes del grupo Last Generation (Última Generación) protestaban contra la aviación, el medio de transporte más contaminante, dijo la agencia noticiosa alemana dpa.
Las seis personas fueron detenidas por la policía.
Los vuelos de llegada tuvieron que ser desviados a otros aeropuertos, según un vocero del aeródromo. Un par de horas más tarde se reabrieron las dos pistas, aunque algunos vuelos podrían sufrir aún retrasos, de acuerdo con un comunicado publicado en su web oficial.
En una publicación en la red social X, Last Generation acusó al gobierno alemán de “restar importancia” a los efectos negativos de volar para el medio ambiente en lugar de “actuar por fin con sinceridad”.
La ministra de Interior, Nancy Faeser, criticó las protestas y pidió que paren. “Estas acciones criminales amenazan el tráfico aéreo y perjudican la protección del clima porque solo causan incomprensión e ira”, escribió en X.
Fraser aplaudió también los esfuerzos policiales para restablecer el orden en el aeropuerto y pidió que se revisen las medidas de seguridad aeroportuaria.
Por su parte, el director general de la Asociación de Aeropuertos alemana, Ralph Beisel, criticó con dureza las acciones de los activistas.
“Irrumpir en una zona de seguridad aérea no es un delito trivial. A más de cientos de miles de pasajeros se les impidió un comienzo relajado y puntual de sus vacaciones de Pentecostés”, dijo a dpa.
Beisel pidió además penas más duras para los activistas que participen en este tipo de iniciativas.