Las granizadas y la sequías han hecho estragos en las cosechas frutales y en general en el ámbito agrícola.
A pesar de que este año se prevé una afectación de hasta el 80 % en la producción de la manzana en Arteaga, el Gobierno Federal sigue sin voltear a ver a los productores del norte, a quienes no ha brindado ningún apoyo durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, señaló el alcalde del municipio, Ramiro Durán.
Hace algunas semanas el edil anunció que las afectaciones de la sequía y las granizadas registradas durante abril en la región manzanera afectaron enormemente a los productores, quienes estiman que este año solo obtendrán un 20 % de la cosecha. Por ello, el Gobierno Municipal de Arteaga, en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Rural de Coahuila solicitó apoyo al Gobierno Federal para atender la situación, a través de la Secretaría de Desarrollo Rural federal y del Bienestar, sin embargo, no hubo respuesta alguna. El alcalde reprochó que en los últimos 5 años, los campesinos de Arteaga no han recibido ningún apoyo federal. Y recordó que antes del 2018, a través de la SAGARPA eran beneficiados con facilidades para la obtención de equipo y maquinaria, construir bodegas de almacenamiento, proteger la producción con malla antigranizo e incluso mejorar los sistemas de riego los cuales propiciaban a la producción del campo.
Aunque actualmente se encuentra el programa federal “Sembrando Vidas”, los productores del sur son quienes son más beneficiados, mientras que los del norte han sido abandonados por el gobierno. “Nosotros también lo merecemos, también somos México aquí en Coahuila”, dijo. Además de ello, señaló que la situación también costó el empleo a cientos de personas quienes en años anteriores eran contratadas como apoyo para el proceso de producción y preparación del árbol, por lo que dijo que el programa federal podría ser una gran ayuda para toda la comunidad. “De los 5 años, no ha habido, aquí en la región de Arteaga, un proyecto que ellos traigan de “sembrando vida” como lo traen en el sur: les pagan más de 5 mil pesos en un empleo temporal para que puedan sembrar vida, reforestar, y tener empleos temporales que mejoren su comunidad.