La afectada aseguró que las autoridades favorecieron a la licenciada.
En un incidente tumultuoso que sacudió las afueras del Ministerio Público, la abogada penalista Teresa Lugo y su cliente, la señora Rosa Elena Andrade, se vieron envueltas en un forcejeo por los papeles de una camioneta, propiedad de la última.
Según relatos de Rosa Elena, hace un año y medio vendió la camioneta a un individuo identificado como Santiago, quien le entregó solo una fracción del precio acordado y le recomendó a la abogada indicándole que era su amiga.
Agregó que Santiago prometió cubrir los honorarios legales de la abogada Teresa Lugo, encargada del caso de su hijo, quien enfrentaba acusaciones de secuestro y asesinato. Sin embargo, afirmó que nunca más supo de Santiago ni recibió el pago completo.
Tiempo después, la señora Rosa Elena se percató que la camioneta la usaba la abogada, quien le comento que había entregado un auto de su propiedad al señor Santiago para poder recuperarla, asegurándole que en un futuro se la entregaría, ya que no podía quedarse a pie por el caso de su hijo.
Sin embargo, pese a que el señor Santiago y Tersa Lugo le habían prometido sacar a su hijo este fue condenado y los honorarios aun así fueron cubiertos, por lo que la señora Elena le pidió la camioneta a la licenciada, pero el alegato desencadenó el conflicto cuando la abogada intentó arrebatar los documentos de la camioneta que Rosa Elena que llevaba consigo.
El enfrentamiento resultó en la intervención de la Policía Municipal, aunque ambas mujeres fueron liberadas sin cargos. Curiosamente, los agentes permitieron a la abogada retirarse con la camioneta, a pesar de que los documentos estaban a nombre de Rosa Elena.
La afectada afirma haber pagado previamente honorarios a la abogada Lugo por el caso de su hijo, el cual terminó en una condena y señalo que presentaría su denuncia correspondiente, pese a que la abogada le aseguro que no podía hacerle nada y que no le regresaría la camioneta.