Entre la semana pasada, las temperaturas alcanzaron entre 68 y 70 grados.
¿Puedes imaginar cómo sería soportar ese calor estando de pie sobre el asfalto o en una azotea sin sombra? Pues bien, esa fue la experiencia de los perros en Saltillo durante esos días, ya que ellos sienten el doble de calor que los seres humanos.
Sandra Ordóñez Mejía, miembro de la asociación Corazón Patitas, dedicada al rescate de animales, explicó que los perros sufren el calor el doble de lo que indica el termómetro. Por lo tanto, recomendó a las personas no mantener a los perros en los techos o sin sombra, ya que sufren el doble. Durante la semana, la temperatura en Saltillo alcanzó los 34 y 35 grados.
"No los pongan en la azotea, ya que sienten el doble de temperatura que nosotros y aunque tengan pelo largo, no deben ser rapados. Los perros regulan su temperatura a través de su pelaje, por lo tanto, afeitarlos sería un error, ya que les quitaría esa protección corporal".
"Hay que asegurarse de que no sufran golpes de calor. Siempre deben tener agua fresca disponible. No estoy pidiendo que los tengan dentro de la casa, pero si tienen un patio o una cochera, es mejor tenerlos ahí, con una lona o algo similar para que no les dé directamente el sol, porque podrían quemarse las almohadillas de sus patas. No se recomienda sacarlos a pasear, al menos después de las 11 de la mañana. Entre las 8 y las 11 todavía es tolerable el calor".
Es un error sacarlos a caminar o a correr bajo el sol intenso, ya que podrían sufrir un golpe de calor. Se recomienda proporcionar agua fresca tres veces al día. Puedes enfriar el agua en el refrigerador o ponerles hielo en un recipiente para que se refresquen regularmente.
"Cuando un perro sufre un golpe de calor, tiende a tumbarse en el suelo, jadear mucho y babear. Lo que debes hacer es mojarlo gradualmente, utilizando una toalla mojada sobre su cuerpo para bajarle la temperatura. Si es necesario, llévalo al veterinario, ya que pueden recomendar administrarle suero para contrarrestar la deshidratación".
Cuando un perro sufre un golpe de calor, que es un aumento excesivo de la temperatura corporal, puede presentar síntomas como vómitos, diarrea, respiración acelerada, espuma en la boca, desorientación, convulsiones y desmayo, lo cual puede llevar a la muerte.
Cualquier tipo de suero es apropiado para hidratar a los perros. Sin embargo, se debe acudir al veterinario si se presentan síntomas de golpe de calor.