La gobernadora advirtió que en su administración no habrá impunidad para los criminales porque estos recibirán todo el peso de la ley.
La gobernadora morenista Marina del Pilar Avila Olmeda, expresó sus condolencias a los familiares de los surfistas asesinados en Ensenada, Baja California, Jake y Callum Robinson, originarios de Australia y Carter Rhoad de Estados Unidos, y afirmó que no habrá impunidad para los criminales.
Los turistas extranjeros presuntamente fueron asesinados por ladrones que les robaron su camioneta, les quitaron la vida y luego los arrojaron a un pozo cerca de la costa, sus cuerpos fueron hallados y extraídos de una profundidad de más de 15 metros.
"Entendiendo el dolor y el sufrimiento que acompañan a sus seres queridos, a quienes extiendo toda mi solidaridad", declaró Marina del Pilar, quien además advirtió que en su administración no habrá impunidad para los criminales que agreden a residentes y visitantes porque "recibirán todo el peso de la ley".
Asimismo, la gobernadora reiteró que desde el primer día de su mandato se ha trabajado intensamente en atender todos los casos de violencia que se presentan y llevar ante la justicia a los responsables, esto luego de que la autoridad Judicial de Baja California vinculara a proceso a Jesús Gerardo "N", alias "El Kekas", uno de los tres responsables del crimen de los extranjeros surfistas cometido en la ciudad de Ensenada.
La morenista, junto con la Fiscal General del Estado, María Elena Andrade Ramírez, explicaron el trabajo realizado para dar con los responsables del crimen de los tres ciudadanos extranjeros originarios de Australia y Estados Unidos, y sostuvo que "gobernar significa asumir como propios los problemas de las personas que habitan en Baja California, porque solo así se puede tener la sensibilidad para entender y atender a quienes necesitan respuestas de las autoridades".
Por su parte, la fiscal Andrade Ramírez, acompañada de Ramón Álvarez Martínez, director del Centro Estatal de Ciencias Forenses, expusieron los hechos y dieron a conocer los indicios que permitieron capturar a los presuntos responsables del asesinato de Jake, Callum Robinson y Carter Rhoad, así como demostrar el trabajo de comunicación permanente que sostuvieron con los gobiernos para lograr la captura.