La medida consiste en implementar programas de desintoxicación y orientación, así como realizar un seguimiento para facilitar la reintegración educativa de aquellos estudiantes que obtengan resultados positivos en las pruebas de antidoping.
El partido político Morena Coahuila propone llevar a cabo estas pruebas en escuelas secundarias y preparatorias, siempre y cuando los padres de familia autoricen su realización. El objetivo es frenar el consumo de drogas entre los jóvenes de 13 a 18 años y evitar que sean reclutados por el crimen organizado. La Secretaría de Salud y la Secretaría de Educación del Estado, en coordinación con los ayuntamientos, deberían participar en la realización de estas pruebas.
En caso de que los estudiantes den positivo en el antidoping, se les ofrecerá un programa de desintoxicación y orientación respaldado por especialistas. Si es necesario, podrán ser ingresados en un centro de rehabilitación autorizado y regulado por las autoridades correspondientes. Además, se les brindará un seguimiento para prevenir recaídas y se les proporcionarán oportunidades para su reintegración educativa.
El diputado Alberto Hurtado Vera destacó la preocupante situación relacionada con las adicciones en Coahuila. Según el Observatorio Ciudadano de La Laguna, el 11.4% de la población del estado, es decir, más de 320 mil personas, ha consumido drogas. Coahuila se encuentra entre las 10 entidades con mayor consumo de drogas en el país. Por lo tanto, se requieren programas de prevención, detección y atención, como la implementación de pruebas de antidoping.
La propuesta del diputado Alberto Hurtado de Morena tiene como objetivo prevenir el reclutamiento de jóvenes por parte del crimen organizado a través de medidas preventivas en el ámbito educativo.
Hurtado expresó: "Los programas de antidoping en las escuelas han demostrado ser efectivos para reducir el consumo de drogas entre los jóvenes". Hizo referencia a la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes, que indica que a nivel nacional el 17.2% de los alumnos de secundaria y bachillerato han consumido drogas en algún momento de sus vidas. Esto afecta la salud física y mental de los estudiantes y aumenta el riesgo de abandono escolar.
Las pruebas de antidoping sirven como herramienta preventiva y educativa, alentando a los estudiantes a abstenerse del consumo de drogas y a tomar decisiones saludables. La percepción del riesgo y las consecuencias de un resultado positivo en las pruebas de antidoping pueden disuadir a los jóvenes.
"Es de vital importancia que los programas de antidoping se realicen con el consentimiento informado de los padres, respetando la privacidad de los estudiantes. Los padres deben estar completamente informados sobre el proceso y dar su autorización antes de que se lleven a cabo las pruebas. Los expertos en prevención de adicciones apoyan el uso de estas pruebas, las cuales, junto con otras estrategias, pueden contribuir a reducir el consumo de drogas", comentó el diputado.
Los especialistas respaldan la implementación de programas de antidoping en las escuelas como una herramienta para reducir el consumo de drogas entre los estudiantes.
El objetivo de los programas de prevención de adicciones va más allá de reducir el consumo de drogas. También se busca disminuir las actividades delictivas asociadas con el narcotráfico y la violencia relacionada. Estos programas son clave en la lucha contra el crimen organizado.
Debido a la pandemia, el consumo de drogas "duras" en adolescentes y jóvenes de entre 15 y 24 años aumentó un 15%. Hubo incrementos del 17% en el consumo de marihuana y del 14% en el consumo de alcohol.
"Con este panorama, es imperativo desarrollar estrategias de intervención más allá de la mera prohibición o criminalización del consumo de drogas. Es necesario implementar programas de prevención y atención que aborden las causas subyacentes del consumo, como la falta de oportunidades, el entorno familiar y social, y la salud mental de los jóvenes", expresó el diputado.