Postes y cercas recientemente se han colocado, cerrando partes del espacio público, lo cual ha generado preocupación y protesta entre los residentes.
Hace algunos años, los residentes de la colonia Alpes Norte se unieron para mantener limpios los márgenes del arroyo que atraviesa la zona, creando así un parque lineal en la ribera interior del fraccionamiento.
Este parque se encuentra en la calle Dr. Carlos Finlay, al fondo de la colonia, donde solía haber problemas con fauna nociva y basura debido al flujo del arroyo.
Sin embargo, después de que los vecinos arreglaron este lugar para crear el parque lineal, repentinamente se instalaron postes con mallas alrededor del extremo de la calle pública.
Sorprendentemente, en las últimas semanas han aparecido construcciones que están cerrando la orilla del arroyo, incluyendo parte del parque en el que los vecinos han puesto esfuerzo.
Presuntamente, las personas que actualmente viven en el número 418 de la calle Doctor Salk, cuya propiedad en el extremo este colinda con la calle cerrada, son las responsables de ocupar esta área pública.
Las reacciones de los vecinos se dividen en dos situaciones: en primer lugar, existe preocupación por la falta de transparencia en la delimitación del parque lineal, ya que al tratarse de un cuerpo de agua, la federación tiene jurisdicción sobre él.
Por otro lado, también se encuentran preocupados por el cierre de la vialidad, ya que ahora hay una cerca y un perro que aparentemente protegen el área para evitar que ingresen personas a esta zona perteneciente al municipio.
Los residentes han expresado su preocupación por la seguridad debido a la aparición de perros guardianes en el espacio cerrado.
Desde hace meses, los vecinos del sector han estado solicitando medidas legales con respecto a la propiedad de esta área en el norte de Saltillo, pero hasta ahora no han obtenido respuesta a sus peticiones.
Uno de los vecinos mencionó que esta acción, que parece ilegal, comenzó hace cerca de 10 años y que poco a poco han ido adueñándose de cada vez más terreno en esta zona, incluso temiendo por su seguridad debido a la agresividad de los perros que vigilan el lugar.
Se espera una intervención por parte de las autoridades correspondientes ante esta queja ciudadana, ya que los vecinos aseguran que no es justo que se apropien de propiedad pública.