Los cortes de electricidad serán de hasta siete horas, cuyo rango horario variará en función del sector de la urbe, según el cronograma anunciado por la Empresa Eléctrica Quito
Ecuador reanudará a partir de este lunes los apagones que se habían interrumpido el domingo a causa de la celebración del referéndum convocado por el presidente de ese país, Daniel Noboa, para votar reformas sobre la lucha contra el crimen organizado y promover las inversiones y el empleo.
En la capital Quito, los cortes de electricidad serán de hasta siete horas, cuyo rango horario variará en función del sector de la urbe, según el cronograma anunciado por la Empresa Eléctrica Quito (EEQ).
Los apagones iniciarán desde el domingo 14 de abril ante la sequía que afecta a la cuenca del río Paute, donde se encuentra el segundo mayor embalse de Ecuador y un complejo de tres centrales hidroeléctricas con una potencia de hasta mil 757 megavatios, con lo que sirve para abastecer alrededor de un tercio de la demanda nacional.
Las lluvias caídas en las últimas horas permitieron volver a operar la central del embalse de Mazar tras tres días fuera de funcionamiento, pero a su vez quedaron inactivas las otras dos que están más abajo, según los datos de producción publicados por Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec).
A ello se suma la caída del suministro de electricidad procedente de Colombia, que enfrenta también una aguda sequía, por lo que no cuenta con excedentes para exportar.
Por ello, Noboa decretó desde el viernes un nuevo estado de excepción para resguardar la infraestructura energética del país y acelerar los esfuerzos y soluciones para recuperar la producción de electricidad, cuya matriz es principalmente hidroeléctrica.
Con esa medida también dispuso el despliegue de policías y militares para custodiar la infraestructura de generación eléctrica para protegerlas de eventuales sabotajes.
Y es que el Gobierno de Noboa denunció por presunto sabotaje a 22 personas, la mayoría de ellos funcionarios, entre las que figura la exministra de Energía y Minas, Andrea Arrobo, quien dos días antes de que comenzasen los apagones descartó que esta medida se fuese a dar a corto plazo.
Para el Ejecutivo hubo una presunta ocultación de información sobre la situación energética del país e incluso una demora en dar alertas para haber intentado mitigar esta crisis energética.
Incluso el secretario de Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, llegó a aseverar que se vació el embalse de Mazar deliberadamente, lo que fue desmentido por la filial sur de Celec, que opera esa instalación y cuyos datos muestran que el nivel del agua ha ido progresivamente bajando desde inicios de año.