El gobierno del país asiático considera a empresas como Google o Apple como un factor de riesgo para la obstaculización de la creación de nuevas compañías
Tokio.- El gobierno de Japón está elaborando un proyecto de ley para multar a las grandes tecnológicas que obstruyan la competencia de otras empresas rivales en el mercado, con penas que podrían suponer hasta 20% de sus ingresos en Japón.
La normativa, cuyo borrador ha sido redactado por la Comisión de Comercio Justo de Japón, sería la primera 'ex ante' en materia de competencia, es decir, disuasoria, para prevenir prácticas antimonopolio antes de que se produzcan, en contraste con la ley actual del país, que aborda estas praxis una vez se han producido.
Empresas como Google o Apple, que mantienen posiciones dominantes en áreas como sistemas operativos para teléfonos inteligentes o tiendas de aplicaciones, son vistas como un factor de riesgo para la obstaculización de la creación de nuevas empresas del sector o el aumento de costes para las firmas que usan dichos servicios.
El objetivo de la nueva normativa es disuadir a estos gigantes de comportamientos problemáticos y permitir a los reguladores responder con mayor velocidad en un área empresarial de tan rápida evolución.
El gobierno presentó este martes el proyecto en una reunión del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), con vistas a su potencial presentación al parlamento este mismo mes y la meta de una rápida aprobación que permita su entrada en vigor en 2025, según detalles publicados este miércoles por el diario Nikkei.
La nueva ley propone restricciones para evitar que los grandes operadores de plataformas bloqueen o impongan prácticas injustas para tiendas de aplicaciones, sistemas de pago o navegadores y motores de búsqueda de terceros, entre otras disposiciones que limitan de facto la oferta disponible para los consumidores.
Las empresas infractoras podrían encarar multas que suponen hasta 20% de sus ventas en Japón, una cantidad que podría aumentar hasta el 30 % en el caso de firmas reincidentes, detalló Nikkei, que tuvo acceso al borrador de la normativa.
Las empresas designadas tendrán que informar a las autoridades japonesas sobre el cumplimiento de esta normativa cada año fiscal.
Esta nueva legislación sigue los pasos de la Ley de Mercados Digitales (DMA, por sus siglas en inglés) de la Unión Europea que entró en vigor en marzo.
La regulación antimonopolio actual de Japón implica demostrar infracciones una vez cometidas, lo que se traduce en una demora de la adopción de medidas por los tiempos de investigación requeridos.
La Comisión de Comercio Justo de Japón ha estado intensificando la adopción de medidas contra los gigantes tecnológicos recientemente y este mismo martes se conoció que está investigando a Google por prácticas supuestamente abusivas sobre su rival nipón LINE Yahoo en el negocio de la publicidad en Internet vinculada a búsquedas, que domina ampliamente en el país asiático.