El consumo de huevo, desde hace años, ha estado rodeado de mitos que satanizan su consumo; en algunos casos, se recomendaba solo el consumo de dos huevos a la semana, esto para evitar que el colesterol se disparara en las arterias. Pero, esta advertencia ha ido decayendo cada vez que se estudian más los beneficios de incluir huevo con más frecuencia en la dieta.
Así lo ha dado a conocer un estudio de la Universidad de Harvard, en el que se detalla que una persona sana promedio puede consumir hasta siete huevos por semana sin temor a un aumento significativo en los niveles de colesterol.
Esto equivale a aproximadamente un huevo por día, lo que demuestra un cambio notable en la percepción de este alimento común.
Los huevos no solo son una fuente de proteínas de alta calidad, sino que también son bajos en calorías y grasas saturadas. Además, están repletos de nutrientes esenciales como vitaminas y minerales, incluyendo luteína y zeaxantina, que son beneficiosos para la salud ocular.
La Clínica Mayo de los Estados Unidos respalda esta perspectiva, afirmando que el colesterol de los huevos no parece afectar negativamente el cuerpo humano en comparación con otras fuentes de colesterol. De hecho, la mayoría de las personas sanas pueden disfrutar de hasta siete huevos por semana sin preocuparse por la salud de su corazón.
La confusión en torno al consumo de huevos, según la Fundación del Corazón, radica en la presencia de colesterol en las yemas. Sin embargo, enfatizan que son los ácidos grasos saturados los principales impulsores del aumento del colesterol en sangre y, por lo tanto, del riesgo de enfermedades cardíacas.
En lugar de restringir el consumo de huevos, la atención debería centrarse en hábitos alimenticios más significativos, como aumentar la ingesta de verduras, optar por alimentos integrales y reducir la cantidad de alimentos procesados.