No deben ser tratados con violencia, pues se trata de un ser humano el cual necesita de apoyo
Con humanidad y comprensión es como los adictos a las drogas deben ser rehabilitados, expresó el sacerdote José López. Esto luego de los presuntos casos de violencia que nuevamente se dieron a conocer en el anexo Sanaréh.
Desde el punto de vista de la iglesia, un centro de rehabilitación para las personas que se enfrentan a las adicciones son muy necesarios, sin embargo, es importante que cumplan con las normas de seguridad, salud y humanidad necesarias, es decir que también sean tratados dignamente.
Requerimientos. De acuerdo al sacerdote, un anexo debe contar con personal capacitado, incluyendo terapeutas, psicólogos, médicos, y depende de cada uno si lo inclina hacia el lado espiritual con alguna religión, pero sin duda alguna en una rehabilitación se debe vivir una completa purificación del alma.
Llamado. El padre dijo “cuando el río suena es porque agua lleva” haciendo referencia en que la denuncia efectuada públicamente debe ser investigada por las autoridades correspondientes y con base en ello juzgar si es o no verídico. “Todas las quejas se deben revisar en tanto la parte demandante como el demandado”. Además, agregó que, en todo momento, los internos deben tener comunicación con la familia, pues son un gran complemento para que tengan éxito en su proceso.
Armonía. “Todo tratamiento de esta índole tiene que tener un lado humanizado, estas tratando a una persona no es un animal irracional es como tal una persona con problemas que siente” mencionó dejando en claro que, no deben ser tratados con violencia, pues se trata de un ser humano el cual necesita de apoyo y no porque ellos en ocasiones sean violentos deben ser tratados de la misma manera. Al contrario, se les debe atender con principios, valores y ejemplos para lograr que purifiquen su alma, en torno al caso el sacerdote recalcó que, las autoridades deben investigar.