La edición 135 del clásico regiomontano entre Rayados y Tigres tuvo ingredientes extras a lo sucedido en el terreno de juego que acapararon la atención, entre los cuales destacaron la actitud de André-Pierre Gignac al salir de cambio y los reclamos de los felinos al árbitro César Arturo Ramos al final de encuentro.
Previo al arranque del partido, seguidores de ambos equipos se dieron cita en el Gigante de Acero y entre ellos estuvo Samuel Reyes, líder de los Libres y Lokos que ya había ingresado sin problema al BBVA.