En 10 años, 'El Supercluster Automotriz Texas-México' se ha convertido en el de más crecimiento en producción de vehículos de Norteamérica.
En 10 años, "El Supercluster Automotriz Texas-México" (TMASC, por sus siglas en inglés) se ha convertido en el de mayor crecimiento en producción vehículos de América del Norte, resalta un estudio de la consultora internacional Accenture.
Indica que esta región binacional está compuesta por Texas, Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila y San Luis Potosí.
Este corredor automotriz, anota, registró en la última década una expansión del 55% en la producción de vehículos ligeros y pesados, a 1.7 millones de unidades al año, con inversiones conjuntas de las armadoras y sus proveedores de 10 mil millones de dólares.
"La producción de vehículos de motor en la región ha crecido en 600 mil unidades desde el 2012, trayendo consigo una amplia red de proveedores y un impulso a todo el sector manufacturero y a la economía en general de la región".
Sólo en Nuevo León operan Kia, Navistar, Daimler y John Deere, y hacia el futuro las expectativas son mayores por las próximas instalaciones de Tesla y Bobcat.
El estudio, patrocinado por el Condado de Bexar, Texas, anota que el sector automotor en el Estado genera el 24.5% del valor agregado de las manufacturas, contra el 18.3% de hace 10 años.
Considerando sólo la producción de vehículos ligeros y cinco regiones en las que Accenture divide la zona del T-MEC para la actividad, el estudio señala que el TMASC produce el 10.2% de este tipo de unidades.
Esto le da la cuarta posición, pero en la última década es la que más ha ganado participación de mercado de producción, con un avance de 4.0 puntos porcentuales.
Las regiones Pacífico y Sur de la Unión Americana avanzaron cada una 3.4 puntos en sus participaciones en el periodo, mientras que la zona Centro-México bajó 0.4, la del Medio Oeste estadounidense cayó en 2.9 y la de Canadá en 7.5%.
El documento también destaca que el TMASC acumula 311 proveedores del sector que dan empleo a unas 206 mil personas.