El líder sindical dijo que la situación de los trabajadores y de la empresa es culpa solo de dos personajes.
El dirigente del Sindicato Nacional Democrático, Ismael Leija Escalante, señaló que la responsabilidad de la crisis de los trabajadores de AHMSA recae únicamente en dos personas, conocidas por todos, y dijo que si están los nuevos inversionistas deben dar la cara con soluciones contundentes.
El dirigente sindical advirtió que el tiempo apremia, ya que en mayo se alcanzará el límite para Minosa, y la urgencia de una solución se hace evidente para evitar que Altos Hornos de México también caiga en la quiebra. Subrayó la importancia del carbón y el fierro en el proceso productivo, lamentando la interferencia de las campañas electorales de cara a la presidencia de la república, en las cuales los candidatos podrían intentar desviar la atención de la situación real. Leija Escalante expresó la preocupación del sindicato ante la falta de ingresos y recursos, afirmando que la situación actual hace inviable la continuidad de las operaciones. Cuestionó la presencia de nuevos inversionistas, exigiendo que salgan a la luz y den a conocer sus objetivos de manera clara y transparente, para brindar certidumbre a los trabajadores.
El dirigente sindical también mencionó que los constantes rumores generan incertidumbre entre los trabajadores y la comunidad. Recordó haber sostenido múltiples reuniones con el conciliador del Concurso Mercantil, quien le ha asegurado que en cualquier momento se llevará a cabo la junta de consejo de AHMSA para oficializar el nuevo consejo de administración. En este contexto, el sindicato demanda acciones concretas y soluciones inmediatas para garantizar la estabilidad laboral y el futuro de Altos Hornos de México, una empresa emblemática en el ámbito industrial del país. La situación precaria que enfrentan los obreros de Altos Hornos de México ha alcanzado un punto crítico desde el inicio de la crisis en diciembre de 2022.
A pesar de las esperanzas de una pronta reactivación, la realidad es que hasta el momento estas expectativas no se han materializado. Los trabajadores se encuentran en una situación de incertidumbre, sin señales claras de los nuevos inversionistas que supuestamente podrían sacar a la empresa de su declive. La falta de declaraciones concretas por parte de los nuevos inversionistas ha generado un ambiente de desconfianza y frustración entre los obreros y empleados de confianza de Altos Hornos de México. Las falsas esperanzas y la falta de información precisa han exacerbado la precariedad laboral y económica que enfrentan estos trabajadores, quienes dependen de la estabilidad de la empresa.