Los refrescos de cola son de los más consumidos en México, esto a pesar de las advertencias sobre las consecuencias nocivas para la salud del consumo recurrente. Estas advertencias hacen hincapié en el contenido de azúcar con las que estas bebidas son fabricadas.
Una de las marcas de refrescos más consumidas tanto en México como en el mundo es Coca Cola y de sus presentaciones, la botella de 600 mililitros es de las más demandadas, pero ¿te has preguntado cuánta azúcar tienen estas bebidas?
De acuerdo con la página de Coca Cola, el refresco de 600 mililitros de este refresco contiene 7.5 gramos de azúcar por cada porción de 100 mililitros, por lo tato, una botella de esta presentación tiene 6 porciones, lo que da un total de 45 gramos de azúcar por botella.
La Organización Mundial de la Salud, recomienda para los adultos con un índice de masa corporal normal, que el consumo de azúcar al 5% de la ingesta calórica diaria. Esto equivale a unos 25 gramos al día, es decir, solo 5 o 6 cucharaditas al día.
Es decir, que una sola botella de Coca Cola de 600 mililtros casi duplica la ingesta diaria de azúcar recomendada por la OMS.
Cabe recordar que el consumo excesivo de azúcar puede conducir a una serie de enfermedades y problemas de salud, incluyendo obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas, caries dentales, síndrome metabólico, enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD), cambios en la microbiota intestinal y un mayor riesgo de cáncer.
Cuánto refresco se consume en México
En México, el consumo de refrescos es el más alto a nivel mundial, con un promedio de 163 litros por persona al año, según datos de la Universidad de Yale. Esto representa un 40% más que en Estados Unidos, que ocupa el segundo lugar con 118 litros por persona al año.
Según Florence L. Theodore del Instituto Nacional de Salud Pública, una familia mexicana destina aproximadamente el 10% de sus ingresos totales a la compra de refrescos. Este alto consumo se atribuye a factores económicos, políticos y culturales.
Se ha observado que siete de cada diez niños en comunidades rurales desayunan con refrescos, y entre 1999 y 2006, el consumo de bebidas azucaradas entre los adultos mexicanos se triplicó. Esto contribuye a un aumento en la obesidad, ya que aquellos que consumen estas bebidas ocasionalmente son un 15% más propensos a padecer obesidad.