La constante amenaza del COVID-19 en los centros de salud y la sociedad

Marcó una pauta a inicios del 2020, en la actualidad y tras 4 años de lo vivido, se ha logrado tener lecciones y formas nuevas de ver las cosas.

A pesar de los avances tecnológicos y científicos, así como del aumento en el número de profesionales médicos en todo el mundo, la pandemia de COVID-19, declarada hace cuatro años por la Organización Mundial de la Salud, ha tenido consecuencias devastadoras en todo el mundo.

Julio Garibaldi Zapatero, jefe de la Jurisdicción Sanitaria Uno, reflexionó sobre el impacto del virus en los sistemas de salud y en la sociedad en general.

Prevención.  Se cuestionó sobre las acciones que los servicios de salud están realizando para la prevención y el manejo de contingencias como la pandemia de COVID-19. Además, señaló que enfermedades como la tuberculosis y el VIH/SIDA también han experimentado un repunte durante este período, pero el coronavirus ha destacado la importancia de la comunicación y la notificación oportuna de situaciones que requieren atención especial.
La pandemia también ha enseñado lecciones importantes sobre el autocuidado y la importancia de las medidas básicas de prevención, como la higiene de manos y el uso de cubrebocas. Garibaldi Zapatero destacó la importancia de aprender a manejar enfermedades difíciles, como el COVID-19, en pacientes complicados que requieren intervenciones como la intubación, así como la importancia de brindar compasión y cuidados paliativos a quienes sufren la enfermedad. A pesar de los avances en el tratamiento y la prevención del COVID-19, Garibaldi Zapatero enfatizó que la pandemia aún no ha terminado y que muchas personas continúan perdiendo la vida a causa de la enfermedad. 

Salud. Recordó que el medicamento Paxlovid, utilizado para tratar la enfermedad, no está disponible de forma masiva ni a la venta al público. Destacó la importancia de no perder de vista el aspecto humano, social y espiritual en el tratamiento de la enfermedad, y enfatizó la importancia de seguir promoviendo la salud y la prevención de enfermedades crónicas. En resumen, a cuatro años del inicio de la pandemia, las lecciones aprendidas nos recuerdan la importancia de la prevención, el autocuidado y la compasión en la lucha contra el COVID-19. Aunque se han logrado avances significativos, es fundamental mantenernos vigilantes y seguir aplicando medidas preventivas para proteger a nuestra comunidad y evitar nuevas pérdidas humanas, lo cual también se tomó como una forma muy dolorosa en cuanto a la ciudadanía de todo el mundo.

 

ver en sitio completo: La constante amenaza del COVID-19 en los centros de salud y la sociedad