La Fiscalía General del Estado ha confirmado que tres cuerpos recuperados recientemente de las aguas del Río Bravo corresponden a ciudadanos mexicanos. Uno de ellos era originario de Oaxaca, otro de Viezca, Coahuila, y el tercero era de nacionalidad mexicana.
La identificación de los cuerpos se logró gracias a pruebas genéticas, lo que permitió su repatriación a sus lugares de origen para darles un adecuado sepelio.
Acciones. Víctor Gerardo Rodríguez, delegado de la Fiscalía General del Estado en la delegación norte uno, informó sobre las acciones llevadas a cabo en coordinación con el área de desaparecidos, consulados, centroamericanos y el Ministerio Público especializado en materia de migrantes. Estas acciones buscan brindar apoyo a los familiares de las víctimas y colaborar en la identificación y repatriación de los cuerpos de aquellos que han perdido la vida en el intento de cruzar la frontera. Este trágico suceso resalta los peligros a los que se enfrentan los migrantes que intentan cruzar el Río Bravo en busca de una vida mejor. Las autoridades continúan trabajando para mejorar las condiciones de seguridad en la zona y prevenir más tragedias como estas en el futuro.
Peligro. Las muertes en el Río Bravo son un recordatorio desgarrador de los peligros que enfrentan los migrantes en su búsqueda de una vida mejor. Muchos arriesgan sus vidas cruzando este peligroso cuerpo de agua en condiciones precarias y con la esperanza de alcanzar el sueño americano. Sin embargo, la travesía está llena de riesgos, desde las fuertes corrientes hasta los traficantes de personas sin escrúpulos, quienes cobran por un servicio.