La ministra de Interior alemana, Nancy Faeser, recibió al comité organizador de la Eurocopa, presidido por el campeón del Mundo de 2014 Philipp Lahm, y reiteró la apuesta del país por un torneo que esté marcado por la tolerancia, la convivencia y el respeto, justo en tiempos de grandes amenazas.
“Recibiremos 2.7 millones de espectadores en los estadios y hasta 12 millones en las zonas especiales para aficionados en las 10 sedes”, dijo Faeser, cuya cartera también es responsable de asuntos deportivos.
“El torneo ofrece una gran oportunidad de celebrar y una fiesta pacífica del futbol europeo, justo en estos tiempos en los que hay una amenaza externa por la agresión rusa además de la amenaza interna de los extremismos”, agregó.
La Eurocopa, según Faeser, debe mostrar cómo el deporte puede ser un antídoto contra toda forma de discriminación y contra el racismo y el antisemitismo y por ello su Ministerio apoyará más de 60 proyectos durante la Europa.
Faesner también se refirió a la estrategia de seguridad, con un centro común en Neuss para los responsables de Alemania y de otros países y al hecho de que, por primera vez de cara a un torneo, la UEFA haya firmado una declaración sobre Derechos Humanos.
El director deportivo de la Federación Alemana de Futbol (DFB), Rudi Völler, dijo que para Alemania una Eurocopa en casa es algo especial, lo mismo que para cada uno de los jugadores.
“Como nación, queremos presentarnos como un anfitrión extraordinario y celebrar una gran fiesta con aficionados de toda Europa”, dijo Völler.
Philipp Lahm, principal responsable de la organización del torneo junto con la exinternacional Celia Sasic, dijo que durante la competencia se podrá vivir la diversidad de Europa.
“Este verano seremos testigos de grandes rendimientos deportivos en los estadios y celebraremos en las zonas para aficionados y tendremos una experiencia de la diversidad de Europa”, aseguró.
Antes de la reunión de Faeser con el comité organizador y la DFB el Consejo de Ministros se ocupó del estado de los preparativos del torneo.
El canciller alemán y los miembros del Gabinete recibieron el balón oficial del torneo.