El presidente saliente de la Asamblea, Raja Pervez Ashraf, tomó juramento a los nuevos parlamentarios a mediodía.
La Asamblea Nacional de Pakistán tomó juramento este jueves a los nuevos miembros electos entre escenas de caos, mientras los aliados del encarcelado exprimer ministro Imran Khan protestaban por lo que sostienen que fueron unos comicios amañados.
Los legisladores del partido de Khan, Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI), gritaron repetidamente “¡Ladrón de votos!” mientras Shehbaz Sharif, que se espera que forme gobierno, entraba en la cámara baja del Parlamento acompañado por su hermano, Nawaz Sharif. Ambos fueron primer ministro en el pasado.
El presidente saliente de la Asamblea, Raja Pervez Ashraf, tomó juramento a los nuevos parlamentarios a mediodía.
En la cámara se escucharon gritos de “¡Viva Sharif!” cuando los hermanos firmaron su acta tras prestar juramento. Bilawal Bhutto Zardari, el joven presidente del Partido del Pueblo Paquistaní y aliado clave de Sharif, fue recibido con cánticos similares.
El nuevo gobierno enfrentará desafíos como el repunte de los ataques insurgentes y la escasez de energía, así como una crisis económica que obligará a Pakistán a pedir otro rescate al Fondo Monetario Internacional.
Legisladores del PTI de Khan dijeron a reporteros que continuarán con su campaña contra la manipulación de las elecciones dentro y fuera del parlamento.
“Sí, la elección ha sido amañada”, indicó Gohar Ali Khan, el actual jefe de la formación.
El PTI ha convocado protestas en todo el país para el sábado. El partido sostiene que sus resultados se modificaron en docenas de circunscripciones para evitar que obtuviese la mayoría, una acusación que la comisión electoral del país niega.
Tras los comicios del 8 de febrero, observadores de la Commonwealth elogiaron a los funcionarios paquistaníes por celebrar las elecciones a pesar de los múltiples ataques insurgentes de los días previos, pero el Departamento de Estado de Estados Unidos indicó que la votación se celebró bajo restricciones a la libertad de expresión, de asociación y de reunión pacífica. La Unión Europea criticó también la incapacidad de algunos actores políticos para estar en la boleta. El Ministerio de Exteriores respondió a las críticas indicando que las elecciones se llevaron a cabo de forma libre, justa y transparente.
Ninguno de los observadores extranjeros describió un robo de votos generalizado.
La Liga Musulmana de Pakistán, o PML-N, la formación de Sharif, y el Partido del Pueblo Paquistaní del expresidente Asif Ali Zardari, fueron las formaciones que obtuvieron una mayor representación en la Asamblea de 336 escaños.
De acuerdo con la fórmula de reparto del poder, el partido de Sharif respaldará a Zardari en las presidenciales del próximo mes. El presidente saliente, Arif Alvi, es aliado de Khan y era un miembro destacado de su PTI antes de asumir el cargo.
Khan está cumpliendo varias penas de prisión y tiene prohibido presentarse u ocupar cargos públicos. Ha sido condenado por corrupción, revelación de secretos oficiales e incumplimiento de las leyes maritales en tres sentencias separadas con condenas concurrentes de 10, 14 y 7 años de cárcel, respectivamente. El exmandatario ha recurrido todos los procesos, pero aún tiene alrededor de 170 pendientes por cargos que van desde corrupción a incitación a la violencia o terrorismo.